Ser canal

 

Hay una palabra para definir deseo de recibir, se dice Ratzón. El deseo es vasija. Una vasija tiene una entrada y la salida está cerrada para contener la Luz 

Hay otro concepto que es Tzinor que quiere decir Tubería. 

Ambas palabras tienen las mismas letras en distinto orden, ¿Qué es una tubería en el fondo? ¡Un canal! 

¿Cómo es una tubería? Es algo muy parecido a la vasija en el sentido de que RECIBE, pero con la diferencia de que deja fluir, da CONTINUIDAD a lo que recibe, no se aferra sino que lo comparte, pero siempre tiene más porque está conectada a algo más alto.

El trabajo de los seres humanos es transformar su deseo de recibir para si mismo en canal. La Vasija recibe y contiene, el canal recibe, contiene y comparte. 

Una vasija se agota pero debemos saber que La Luz nunca deja de suministrar, así que si no destapo, si no comparto, no cabe más. En un canal no pasa eso. Siempre está llena porque siempre está fluyendo. 

La vasija tiene dos maneras de existir

1) recibe y se lo queda

2) recibe y se vacía, es un yo limitado

 En realidad, tener vasija es una fase de nuestro trabajo espiritual, pero no debe quedarse ahí, realmente es ser espiritual busca hacer una fórmula de tres.

Tienes que involucrar "Luz -Yo-Otros": Luz, tú como Canal, y Receptor(es).

Así es como nosotros adquirimos afinidad con la Luz, volviéndonos seres que comparten. Recibimos de lo Alto, pero damos sin ego porque sabemos que a su vez nosotros hemos sido receptores antes de poder dar.

Seguiremos trabajando en estos conceptos.

Shabbat Shalom Comunidad

Prana Raquel Pascual

Basado en clases de El Centro de Kabbalah Internacional

Imagen https://apartirdeunafrase.wordpress.com/2016/03/07/compartir-es-construir-frase-ilustracion-de-joan-turu-joanturu-dibujante-artista-de-revista-como-el-mismo-se-define-e-ilustrador-catalan/

"Tener vasija"

 

Recordando nuestras bases espirituales:

Hoy recordemos que significa el concepto "Tener vasija". 

Hay una palabra para definir "Deseo de recibir", en hebreo se le dice Ratzón. 

El deseo es una vasija. Una vasija tiene una entrada pero la salida está cerrada, y es así que puede contener la Luz.

Cuando hablamos de contener, hablamos de poder recibir pero además de poder apreciar lo que nos es dado y mantener viva esa flama del deseo. 

Por ejemplo, te dan un buen trabajo y lo puedes conservar y disfrutar, incluso dar extra millas y crecer. Tienes una pareja y te sientes satisfecho, puedes pensar a largo plazo sin sentir que estás atrapado o limitado. Tienes dinero y puedes ahorrarlo, invertir y sentir que no te falta, que tienes suficiente y no sientes carencia. 

Esos son ejemplos de que tienes "vasija" para mantener la bendición, como quien tiene un cuenco en el que te dan agua y tu puedes beberla con calma porque está ahí para ti, no desaparece. La vasija espiritual se crea a partir de desear, generar méritos, hacer restricción (aprender a no desesperarte o querer robar, manipular o forzar el proceso de recibir), y poder tener gratitud, apreciación y afinidad. 

El que no tiene aún vasija, es como quien recibe y se le escurre sin poder tener permanencia de la bendición. Veamos ejemplos para identificarlo:

La luz si llega, pero no tiene donde depositarse por demasiado tiempo, y lo vemos por ejemplo en gente que recibe un puesto para el que no se preparó ni está dispuesto a aprender, su ego le dice que el es el jefe y causa destrozos como le pasa al "Aprendiz de Mago", que aunque tenía poder, este se le sale de control y crea un desastre. 

Lo vemos en quien llega a la fama sin estar listo y con ello, se le desorganiza la personalidad al grado de tener que drogarse o alcoholizarse por no poder con dicho peso por falta de madurez, caer en soberbia porque "es demasiado" para su capacidad de recibir de manera equilibrada y veremos pronto el corto circuito de que esa fama lo destroce.

Es como quien puede ligar pero no quedarse y generar compromiso, los verás que huyen o a quienes se les esfuma a manera de amor fugaz, eso muy posiblemente es por aún no tener "Vasija" para poder hacer la restricción que demanda una pareja estable y feliz. O simplemente quien huye ante las opciones, "se cierra a las posibilidades" por miedo, por baja autoestima etc.

Kabbalah significa Recibir y por ello tener vasija es imprescindible. 

La Luz siempre da, pero si nosotros no estamos listos para recibirla será como quien no puede comer y nutrirse a pesar de que la mesa esté puesta.

Quien tiene Vasija no teme dar, porque sabe que si realmente hay contenedor, la Luz se encargará de volverla a llenar.

Para no hacer demasiado largo este post, mañana veremos que es Ser Canal.

Feliz día Comunidad

Prana Raquel Pascual - Coach - Psicoterapeuta

Imagen https://es.wikipedia.org/wiki/Aguador La aguadora, de Francisco de Goya, hacia 1810 (Museo de Bellas Artes de Budapest).