Lunes, 9 de noviembre de 2015
Cada vez que estamos en una situación que nos pone en conflicto con nuestra infinita Luz interior de amor y generosidad pura, en realidad se nos está presentando un momento para regresar a la unidad con la Luz del Creador que está en nuestro interior. Las personas y las situaciones que se presentan en nuestra vida —de hecho, en todas nuestras vidas— simplemente son agentes que despiertan esos aspectos internos que aún necesitamos corregir y reparar. Mientras más hagamos este trabajo, más bendiciones, amor y energía puede fluir a través de nosotros
.
La razón por la que el miedo, la ira, el odio o el resentimiento aparecen en nuestro interior, en el momento que lo hacen, es porque esos momentos —por razones más allá de nuestra comprensión— son la ocasión perfecta para que nos responsabilicemos por nuestra propia negatividad; eso nos permitirá liberar espacio dentro de nosotros para que entre nueva energía y milagros.
.
La razón por la que el miedo, la ira, el odio o el resentimiento aparecen en nuestro interior, en el momento que lo hacen, es porque esos momentos —por razones más allá de nuestra comprensión— son la ocasión perfecta para que nos responsabilicemos por nuestra propia negatividad; eso nos permitirá liberar espacio dentro de nosotros para que entre nueva energía y milagros.
El día de hoy, ve tus desafíos como oportunidades para alcanzar la unidad con la Luz y hacer espacio para que entren los milagros en tu vida.
Karen Berg
_______________
Esta semana nacen en la Torah, dos personajes que nos muestran la dualidad de lo humano: Jacob y Esau. No son los únicos gemelos en la historia que nos ponen a pensar en la polaridad de nuestra propia naturaleza, todos somos un poco ángeles un poco diablos, un mucho generosos y un mucho egoístas en muchas ocasiones, y sin embargo, esa dicotomía es la que nos pone la tensión en el equilibrio de nuestro ser para manifestar la Luz de la Creación.
Si no tuviéramos esta característica de tener el famoso diablito y angelito que sentimos que nos habla y nos aconseja cuando tenemos que tomar una decisión difícil, no tendría ningún mérito "ser bueno", o hacer acciones de Luz. Seríamos puramente como loa ángeles que no tienen que enfrentar el proceso de elección. Nosotros sí.
Esta semana, podemos conectar con algo maravilloso que se llama Mazal (mazalá) que también se puede comprender como "buena estrella". Nos cuenta Ariel Grunwald en 2007 al respecto:
Mazala tiene el mismo
valor numérico que Lejem (Pan)y Melej (Sal)
"Da tu conocimiento y
todo lo que tienes para poder compartir y canalizar, para dar sustento."
En Shabbat hay 4 líneas
que se repite en que está escondido el nombre de Isaac y de Rivka.
Habla de ser un canal. Se suponía que Jacob no debía recibir la bendición pero
la recibió y así mismo queremos que nos
pase a nosotros si o si.
La manera de hacer esta conexión es actuar como un canal, pero sin agenda, sin reconocimiento alguno para lo que hacemos por el otro.
Así fue uno de los milagros que leemos. Isaac finalmente rezó por Rivka para que ella concibiera. Ella llevaba 20 años rezando por concebir y no fue escuchada. Isaac si fue escuchado cuando rezó porque después de ese tiempo realmente escuchó el dolor de ella y lo hizo suyo. La clave es compartir sin agenda personal, sin buscar reconocimiento alguno. Entonces las maravillas de ser de Luz se nos manifiestan.
¿Difícil? Si. Hay que vencer esa fuercita que nos impele a ser de una o de la otra manera, Jacob o Esau...esa es la chamba"
Vamos a la semana Comunidad
Prana Raquel Pascual
Psicoterapeuta Gestalt