domingo, 17 de abril de 2011

DOMINGO, 17 DE ABRIL DE 2011. Tres reglas de oro

DOMINGO, 17 DE ABRIL DE 2011
 
Comienza hoy tu semana con un recordatorio de las tres reglas de oro que siempre te conducirán a una vida mejor:

Certeza: Elimina el confort y toma riesgos. Así es como te conectas con la mejor parte de tu ser, la de los demás y con el propósito de tu vida.

Verdad: Mentir o guardarte las cosas evita que experimentes tu verdadero potencial en cada aspecto de tu vida.

Compartir: Compartir es el combustible que te permite hacer tu trabajo en el mundo.

Yehuda Berg
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Justamente ayer leía algo acerca de la segunda regla en un texto de Rav Berg en la introducción a la Haggadá de Pesaj. Dice así;

En Pesaj nosotros dejamos a la Luz que remueva nuestros problemas...pero ello requiere de entendimiento. Tenemos que entrar y descubrir donde queremos que entre la Luz y remueva a la oscuridad. Tenemos que identificar nuestra oscuridad para saber hacia donde dirigirla.

"La Luz no va a entrar a ningún lugar al que nosotros mismos temamos entrar"

Muchas veces tememos admitir cual es el problema y su dimensión. Nos da miedo ver lo que nos hace sentir vacío, y la magnitud del problema que nos está plagando.

Qué nos hace perder el sueño, deprimirnos y que nos mantiene separados de lo que de verdad queremos hacer.

La Luz sólo entrará donde nosotros la dejemos.

El primer paso es internalizar que la Luz no hace, nada que nosotros no hagamos.

En Salmos 121 el Rey David escribe HaShem Tzilcha, Di-os es tu sombra. La Luz hace lo que nosotros hacemos y lo que no queremos hacer, no lo hace. Cualquier limitación auto-impuesta que tengamos, también limita a la Luz.

Nadie, ni Di-os ni tu sacerdote o rabbi, puede hacer el trabajo de la Luz, por ti. Tenemos que ir a nuestra oscuridad, admitir que está ahí y sentirla para bien y para mal. Tenemos que darnos una mirada objetiva, ver los problemas y cualidades que rigen nuestras relaciones destructivas, así como nuestros comportamientos también destructivos.

Encontrar esos lugares de oscuridad es la mitad de la batalla. Antes de eso, la Luz no puede removerlos.

Segundo paso: Traer la oscuridad a la Luz y mostrarla a alguien más.

Cuando finalmente abrimos nuestros ojos y encontramos cosas que no son buenas de nosotros mismos, cosas de las que no nos enorgullecemos, que nos avergüenzan, debemos abrir nuestra oscuridad a alguien más.

Cuando somos suficientemente fuertes para compartir nuestras iniquidades, hacemos que la Luz fluya.

Aún haciendo este espacio para que la Luz entre, aún hay cosas que hacer. No es fácil.Cuando los bloqueos aparecen --y lo harán-- si no tenemos la Luz, si no contamos con la tecnología para sobrepasar los obstáculos será muy difícil.

El texto es mucho más abundante, pero básicamente menciona estos pasos como imprescindibles para salir de las situaciones esclavizantes de nuestra vida, esos lugares donde nuestro libre albedrío no impera porque no tenemos acceso.

No siempre he tenido el mismo nivel de consciencia del poder de estas fechas, pero cuando pienso en situaciones de mi vida que no he podido cambiar, por más que me esfuerce, que no logro ver donde se encuentra la manija, entonces de verdad, he empezado a suplicar por tener la oportunidad.

Muchos no lo vemos a tiempo y nos quedamos en circulos viciosos por muchos más meses o años...de verdad ¿No te de escalofríos pensarlo?

Estos días para mi han estado haciendome sentir y pensar que quiero cosas totalmente distintas a las que ahora vivo. He llorado mucho ya por ello, porque con mis propias fuerzas me doy cuenta que no es suficiente, que aún con mi arrogancia, que aún con lo que pueda ser mi inteligencia o mi don de la palabra, no he logrado mover la roca que me interrumpe de lo que sería un mejor destino.

Por esos dolores con los que vivimos, debemos estar constantemente preguntándonos a nosotros mismos "¿Cómo puedo inyectar Luz a esta situación? Si no lo hacemos, quiere decir que somos esclavos, y cuando no hay Luz, no hay opción. Cuando no dejamos entrar a la Luz, apagamos nuestro propio poder.

Espero de corazón, que logremos --cada uno de los que hemos estado haciendo esta búsqueda-- apuntar la linterna con tino hacia esos espacios oscuros que nos han estado bloqueando la felicidad por ya tantos y tantos años. =..(

Prana Pascual