lunes, 30 de agosto de 2021

Caminos de justicia y misericordia

 


Rosh Hashaná (Cabeza del Año) es conocido comúnmente como el año nuevo israelita.

Tradicionalmente, Rosh Hashaná es conocido también como un tiempo de juicio con el Creador de nuestras acciones durante el año recién terminado, pero de acuerdo con la Kabbalah, ambas descripciones de Rosh son inexactas.

La Kabbalah enseña que la fuerza a la que llamamos Di.os no preside una corte celestial decidiendo quién será perdonado y quién será castigado, y dado que ocurre realmente en el séptimo mes del calendario hebreo tampoco es exactamente el inicio del año en estricto sentido.

Rosh Hashaná está construido sobre el fundamento de la ley universal de causa y efecto, aunque podemos no estar conscientes de esto.

Rosh Hashaná es nuestra oportunidad para confrontar la energía negativa despertada por medio de los actos indebidos que hemos cometido en el año que recién terminó. Cada año tenemos esa oportunidad para no seguir llevando temas vetustos al resto de nuestra vida, no hay que esperar a un Juicio Final, sino que cada año podemos arrepentirnos y cambiar (esto es especialmente importante, porque el fin de cuentas, no se trata de vivir castigados, sinos transformar, de refinar nuestra alma a partir del Tikun, "La corrección").

Es un momento especial en el ciclo espiritual del Universo que está estructurado de modo que las consecuencias de nuestras acciones negligentes, intolerantes, hirientes, regresen a nosotros como repercusiones de nuestras propias acciones. La corte de causa y efecto está en sesión, pero ojo, no es simplemente quedarnos sentados a esperar el golpe: este mes y durante todo el proceso espiritual del mes siguiente, lo que esperamos lograr es una transformación que prácticamente sea un cambio en nuestro destino.

Para cerrar el comentario te haré una distinción que es importante: aunque muchas veces mencionamos Karma y Tikún como sinónimos, no son exactamente iguales. Karma sería un poco la ley del Talión, ojo por ojo, diente por diente. El Tikún funciona similar mientras no haces trabajo de la consciencia, pero si transformas proactivamente y te das cuenta de lo que has hecho, si cambias suficiente para ser prácticamente "otra persona", y si es posible reparas con acciones en el mundo que te rodea, ya no es necesario que te caiga "el misil" encima. Tu mismo ya pasaste por el purgatorio del cambio y saliste diferente, nadie te lo aplicó, tu mismo lo anduviste y de ahí que tu destino pueda cambiar.

Kabbalah es una espiritualidad que nos muestra caminos de justicia y misericordia, la culpa no es parte del sistema más que para ser transformada en responsabilidad y eventualmente en conductas de compartir y de Luz.

A trabajar Comunidad

Prana Raquel Pascual - Psicoterapeuta - Coach

Imagen https://twitter.com/filosofocreador/status/1196903995287252992?lang=gl