miércoles, 12 de julio de 2017

El hígado y su función.

Esta semana está relacionada con todos los secretos de la sanación. Es muy impresionante si revisamos el Zohar podemos encontrar la descripción de todos los órganos del cuerpo y detalladamente su funcionamiento, lo cual no sería tan sorprendente, si no fuera un libro con 2000 años de antigüedad ¿Cómo puede estar tan detallado?

Pero no es momento de hablar de esto sino de varias cosas que nos son relevante como personas.

En el código, que es bastante comprensible a pesar de todo, se habla de los pulmones, como de las alas de un ángel que son los que enfrían al cuerpo al "batir sus alas", pero también menciona del hígado de su relación con todas las enfermedades y de que está controlado por el Satán.

Sabemos que el hígado tiene una función importantísima para eliminar los desechos del cuerpo, descomponer las grasas, producción de proteínas y colesterol, generar glucógeno para producción de energía, procesa la hemoglobina para almacenar hierro, transforma el amonio tóxico en urea, depura la sangre etc etc etc.

Y sabemos también que es un órgano de gran choque en el momento que tenemos emociones tales como la ira (la bilis está relacionada con ello). Y si pensamos, muchos de los padecimientos de colesterol malo, de cirrosis, etc. ocurren aquí y son muy devastadoras de la salud.

Justo, las emociones negativas son las que nos llevan a dañarlo...¿Y que nos provoca emociones que nos enferman?

Generalmente eventos de enojo, de envidia, de vergüenza intensa, de abuso de sustancias tóxicas que no consumimos exactamente por sentirnos bien, sino para acallar algo como ansiedad, miedo etc.

Una de las principales soluciones que nos han enseñado nuestros Maestros es la confesión, el vidui, y la teshuvá, el arrepentimiento. Ojo, no la culpa como tal, más bien cuando no lo hablas, cuando lo guardas es eso: culpa y vergüenza.

Cuando te tomas el trabajo --generalmente humillante-- de hablar de esos temas dolorosos con alguien en quien confías pero a quien te duele confesarlo, puedes manejarlos, se restablece de alguna manera la homeostasis. Digamos lo de esta manera, das oportunidad a que tu ego sea abatido.

¿Que tendrías que confesar? ¿Que secreto o que vergüenza tienes que se te está quedando de forma dañina en tu sistema?

Vale la pena que lo pensemos, porque toda enfermedad es un efecto, no una casualidad.

Feliz día
Prana Raquel Pascual
Basado en clase de El Centro de Kabbalah México 2012
Imagen http://www.saberia.com/cual-es-la-funcion-del-higado/