martes, 23 de febrero de 2010

Un comentario para reflexionar. Purim.


El día de hoy no ha llegado todavía la afinación de Yehuda, pero sin embargo nuestros Maestros nos han compartido a lo largo ya de los años muchos secretos que se revelan en esta semana.


Mientras esperamos la afinación, les voy a compartir algo que me ha pasado en este momento.


Yo sigo a Yehuda por tanto en este momento tengo la libertad de poner lo que yo quiera, más sin embargo no quiero que sea mi espacio de escritura libre. Quiero relacionarlo siempre a la consciencia de la semana, no sólo a mi estado de ánimo o a lo que a mi se me ocurra gratuitamente.


Esto me ha remitido a una lección que hemos aprendido y que Ariel ayer en la Clase de Consciencia nos contó y que quiero compartir para que reflexiones en ella.


Esta semana sucede Purim. Purim es una apertura cósmica, una ventana en el tiempo que está para ayudarnos a vencer ciertas cosas.


Los kabbalistas cuentan que todo en este mundo por malas que parezcan en esencia son buenas, si llevamos cada cosa a nivel de semilla es bueno, lo malo es que en el camino se va llenando de ego, pero el nivel de semilla era bueno.


Hay cinco cosas que hacemos en Purim, una de ellas es leer Megilat Esther. Meguilat significa revelación, Esther viene de Sether que quiere decir secretos, es el concepto de revelar lo escondido. Que es lo que estamos revelando? Estamos revelando la semilla. Es por eso que además de escuchar esta lectura, usamos un disfraz.


Todos nos ponemos un disfraz todos los días, todos nos ponemos una máscara de como queremos que nos vean. En Purim queremos cubrir el "yo" que generalmente está expuesto para poder revelar el que no está expuesto. Esconder el aparente para sacar el verdadero.


¿Cómo más se hace esto? Tomando alcohol en esta fecha específica, ya que a través del alcohol se alcanza un nivel de At Deloi Adá (disculpen si no está bien escrito, es de "oído" y beber es sólo en esta fecha con la energía y la intención correcta). Llegar a un nivel donde todo es bueno, es como el Árbol de la Vida, todo es Uno. Esa es la consciencia de Mesías. La luz está en todo, y eso nos ayuda a sacar nuestro verdadero yo sin las culpas, sin los miedos.


En la fiesta hay que tener una intención, tenemos que inyectarle una consciencia, no es ni solo la fiesta, ni que en la fiesta me mantenga en un rincón meditando. Medito, inyecto la consciencia y después hago la acción. Por cierto que conectar con la alegría en esta fiesta es imprescindible.


Al día siguiente se vuelve a leer la Meguilat Esther y se hace una comida llamada la Comida del Mesías. La comida se usa para bajar la energía espiritual.


Otra acción es "Mishloaj Manot" intercambiar regalos pero a través siempre de un tercero. Esta idea es hacerlo a través de un intermediario, esto es para entender que "lo que yo te doy a ti no es mio. Todo lo que recibo no es para mi sino para compartir a otro."


Otra cosa que se hace es "Regalos a los Pobres", ojo no es Caridad, no es Donativo, es Regalo que es lo que le doy a mis iguales. Este nos hace inyectar la consciencia de que cuando doy no es que yo estoy realmente dando, sino teniendo la oportunidad de compartir, de dar. El que gana al dar soy yo mismo.


Otra acción de consciencia de este día es "Majatzit a Shekel" (Medio Shekel) que viene de la época de la Biblia cuando Di-os le dice a Moises que cada isrealita tiene que contribuir con medio shekel para construir el tabernáculo, construir el Bien Común.


La contribución que se pedía no era para pedir dinero, porque si no, no hubiera sido medio shekel sino un millón, no. La intención es entender que todo lo que yo puedo hacer, mi esfuerzo, mi estudio, toda mis transformación, todas mis acciones de compartir, son suficientes "como la mitad del trabajo", si la Luz nos me pone la otra mitad todo lo que hago es la mitad del trabajo. En mi vida tiene que estar la Luz, sin embargo, saber que nosotros tenemos que enfocarnos en poner nuestra mitad.


En Purim queremos desprendernos de nuestro ego de preocupaciones del futuro, culpas del pasado de los que demás piensan de nosotros, en Purim queremos estar felices de ser quienes somos. Estar aquí y ahora y saber que todo es bueno, y que si ese día podemos atrapar la energía podemos mantenerla con nosotros todo el año.


Muy bien. Mi intención de hoy ha sido poner mi mitad de Shekel. Tu pon el tuyo meditando cuales son tus dudas, tus miedos tus culpas, de donde vienen. Qué máscaras te pones. Haz tu trabajo de ver cual ha sido la semilla de tu intención. De ver que hay que remover de ese que no eres tu y empieza a estar listo para esta ventana de oportunidad.


¡Nos vemos mañana!


Prana Pascual

Extraído de la clase de consciencia impartida ayer por el Maestro Ariel Grunwald del Centro de Kabbalah, Cd. de México.