viernes, 28 de junio de 2024

Infantilismo


La espiritualidad usualmente nos ofrece paradojas que debemos resolver con una consciencia muy despierta pero también estudiosa. A lo largo del camino me he dado cuenta que tan solo ser intuitivo puede hacernos caer fácilmente en manos de nuestro Satán, que también sabe hablarnos al oído y hace parecer sensato lo que no lo es.

Los comentaristas de la Torah, explican que los espías, los diez que fallaron iban con una consciencia perfecta cuando Moshé y El Creador los asignaron, pero cuando después escucharon a los demás israelitas, sus deseos y sus comentarios, se dejaron motivar por ellos e influenciarse, y fue ahí que se volvieron negativos.

Querer cumplir las expectativas de todos eventualmente nos desordena y nos hace caer.

Por supuesto los enviados sabían la importancia para todos de su misión, pero escuchar a todos no hizo más que deteriorar el objetivo y su consciencia para lograr lo que realmente Moshé les había encomendado.

Tratar de cumplr los deseos y expectatvas de todos es la puerta para que la consciencia caiga.

No es que no busques el bien común, solo que normalmente pensar que es "el pueblo bueno" el que sabe realmente lo que le conviene es una falacia.

Se ve y se oye bonita la idea de este tipo de populismo en la teoría, preguntarles a todos y a cada uno, pero ahí estás haciendo una mezcolanza de niveles y de deseos personales que nada tienen que ver con el bien común. La masa nunca te asegura que te estás asociando a la consciencia más elevada. A veces lo que se requiere es independencia de criterio para poder ayudar al pueblo que normalmente no son las más elevadas ni en saber, ni en desear, ni en hacer, (si así fuera, ¡otro gallo nos cantara!)

Es como en estos tiempos actuales en que los niños han empezado a gobernar por sobre de los adultos. Si un niño no quiere comer sus verduras, o no quiere usar unos brackets para componer su dentadura o recibir una reconvención porque a su manera de ver viola sus derechos, ahora ellos gobiernan a los padres y maestros, quienes se someten, convencidos de que educar es violentar y he ahí que tenemos una generación infantilizada hasta ya muy entrada la edad en que en otras generaciones ya se era responsable.

Sé que parece un discurso antipático para la mirada libertaria de la actualidad, en la que ya nada tiene un orden porque se juzga violatorio de los derechos humanos.

El verdadero derecho es a ser educado, no ha ser consentido en todas las demandas del ego.

Cuando sucumbimos a esos "deseos niños" (Katnut) en vez de hacer caso a Gadlut (estado adulto de la consciencia) lamentablemente en vez de crecer, caeremos como cayeron los espías, no solo como individuos, como sociedad.

Shabbat Shalom cuando sean visibles las tres primeras estrellas en el firmamento.

Prana Raquel Pascual - Psicoterapeuta Gestalt

Imagen https://www.impala.pt/noticias/portugal-e-o-mundo/infantilismo-adultos-querem-ser-criancas/