MIÉRCOLES 27 DE ENERO DE 2010Todo empieza y termina con nuestra propia conducta individual.
Cuando somos honestos con nuestras emociones, por muy oscuras que sean, invitamos a otros a ser honestos y enfrentar su propio dolor. Y entonces ocurre la transformación verdadera; así es como vamos a arreglar este planeta.
Pero cuando suprimimos, cuando somos falsos, enviamos un mensaje a otros de que necesitan ser falsos también y retener su verdad. Así es como las cosas permanecerán iguales.
Hoy, sé real. No necesitas ser nadie más sino quien eres tú. Ser honesto ayuda al resto de nosotros a encontrar nuestra verdad.
Yehudá Berg
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He estado comprendiendo a partir de la lectura de las porciones de Éxodo (en realidad "Shemot") algo que aunque es evidente desde que empiezas a estudiar Kabbalah, no lo haces parte de tu "memoria celular" hasta que van pasando varias espirales de tu proceso.
Tu eres responsable de tu proceso y a partir de eso Di-os o el Universo o el Creador, como sea que entiendas esa fuerza creativa, responde. Esto se refleja en las cosas que te pasan, la gente que encuentras en tu camino, las circunstancias que te toca enfrentar.
Les comparto algo que uno de los chevres del Centro me mandó , me pareció super esclarecedor después de tres años de estudiar, entender mucho más el código de lo que significa el Maná y relacionarlo con la propia vida y acciones:
"Sólo una pequeña historia: Durante el tiempo de los israelitas, estando en el desierto y después del éxodo, uno de los principales alimentos era el maná del cielo.
¿Qué era el maná del cielo? Esta era comida que venía de un nivel metafísico, pero manifestado en el nivel físico.
Lo que era especial acerca de este alimento es que podía tomar el sabor de lo que los israelitas desearan, si querían un bistek, lo era, si querían vegetales así era. Si querían helado, lo era. Sólo no se veía tan atractivo como esas diferentes comidas.
Las personas que no tenían verdadera certeza:
1) No sabían donde les llegaría el maná al siguiente día y,
2) Pasaban momentos duros aún imaginando la comida, ya que no se veía tan atractiva como la comida que querían en su imaginación; como resultado, nunca realmente probaban el sabor de tan grandiosa comida
Esas personas que tenían fe y que tenían certeza sabían que había realmente comida ilimitada y eran capaces de apreciarla, caía justamente afuera de sus tiendas, estaba donde la quisieran y siempre llegaba en el momento justo. No había miedo en su corazón y ellos ni siquiera pensaban en ello, sólo venía cuando la necesitaban.
Aquellos que tenían miedo y no tenían certeza siempre estaban preocupados de si iban a conseguirla o no y dónde y ellos usualmente tenían que esforzarse mucho más que la otra gente que si tenía certeza, para conseguirla."
Es algo así como "estímulo -respuesta" con el Universo. Claro que demanda maestría personal porque en este caso nuestras monedas para el juego es el manejo de nuestros pensamientos, emociones, acciones y todas en un ciertamente invertidas con un nivel de serenidad interna llamada Certeza.
Hoy específicamente Yehudá nos pide: Invierte HONESTIDAD en tus relaciones.
Hoy y siempre claro está, si eso quieres cosechar. Y así vamos día a día aprendiendo como volvernos "agrónomos espirituales". ; )
Vamos...¿Te animas a seguir invirtiendo?=)
Prana Pascual
