Cuando hablamos de hacer restricción, que es uno de los conceptos medulares de hacer trabajo espiritual, por no decir EL TEMA CENTRAL, una de las preguntas clásicas es ¿Cómo se hace restricción cuando ya estás enojado o a punto de caer en el impulso?
La verdad es que si ya estás ahí y no has hecho trabajo previo, lo más que vas a hacer es REPRESIÓN, lo más que harás será aguantarte, pero eso no va a ser Restricción.
Sabrás que solo reprimiste por la cantidad de energía emocional que necesitarás para parar en seco y por la sensación de malestar que quedará de como actuaste. Sentirás que fuiste débil, o que no le dijiste a la persona todo lo que en realidad se merecía.
La restricción lleva un grado de transformación que ya puede ver la situación desde una perspectiva mucho más desapasionada.
Ya puedes entender para que es útil en tu vida esa situación, ya entendiste a qué te estás enfrentando y cuanto has crecido gracias a la prueba, por eso se dice que tienes que hacer ángeles antes de ir a la batalla, porque tienes que haberla librado antes de llegar al momento real.
Tienes que haberte auto-observado y tenido claridad de "Para qué" te estás teniendo que enfrentar a este "monstruo"
Jacob mandó ángeles que le precedían. Esaú pudo captar esto, y cuando le encontró, después de haber asegurado que le mataría la siguiente vez que le viera, tan solo pudo besarle.
Así se verá cuando realmente ya no estalles en desesperación y quieras manipular los hechos y convencer a otros de lo bueno que eres y de por qué no te mereces lo que te hacen (ja ja...Supongo que todos nos hemos visto en una situación o muchas así...¡¡¡Por qué a mi que soy tan buen@!!!)
Un día maduras y entonces es que ya puedes realmente tener ángeles que hagan la batalla por ti.
¿Cómo andas en tus ejercicios de entendimiento y auto-observación en estos días?
Prana Raquel Pascual
Coach de Vida y Carrera / Psicoterapeuta