lunes, 18 de febrero de 2019

¿Gracia o Desatino?


Ayer hablamos de esta gente denominada "Los Erev Rav", quienes toman un papel muy sustantivo en esta porción de la Torah que recibimos esta semana.

¿Qué pasa en Ki Tisa?

Varias cosas, una de ellas es un episodio en que se pide la ofrenda de corazón a cada israelita: medio shekel, no más, no menos. No por rico se pedía más no por pobre se pedía más, en realidad se trata de que todos participamos en el proceso 50% el Creador y 50% nosotros, los humanos tenemos participación en nuestra vida, no hay un determinismo absoluto en lo que vivimos y claro, eso es lo que a veces nos vuelve locos, pero también es lo que nos da la libertad de ser seres que pueden optar por la espiritualidad, el sobreponerse a la ilusión de este mundo físico que nos hace pensar que todos es un caos cuando en realidad si hay un orden para todo.

En esta porción, también aparece el concepto de "El Becerro de Oro", así que esta semana tiene varias claves de cómo conectar, pero claro, también cómo desconectarse de la certeza de que el proceso nos está llevando a las lecciones que nos dan la oportunidad de ponernos por encima de la reactividad.

Es justo en la creación del Becerro de Oro en la que los Erev Rav influyen en la consciencia de los israelitas y les hacen caer en la desconfianza y la duda que los aparta de poder recibir la Luz.

Esta semana tendremos entonces que poner atención a dos conceptos importantes: nuestra participación deliberada y consciente en el proceso de fluir con la luz en armonía, y tolerar la espera, tolerar la frustración que viene antes de la revelación de la luz que para nuestro caso puede ser tener la noticia que esperamos, el ascenso, la oportunidad de hacer algo por lo que hemos trabajado desde tiempo atrás.

Pongamos atención y tratemos de estar concentrados en nuestra mejor versión para que no perdamos la oportunidad de actuar con gracia y no con desatino.

Prana Raquel Pascual
Imagen: https://definicion.de/paciencia/