domingo, 3 de agosto de 2008

Hablar desde el corazón. Agosto 3. 2008.

DOMINGO 3 DE AGOSTO DE 2008. A través de los años, han existido grandes y poderosos Kabbalistas que han tenido influencia en las multitudes como: Moisés, el rey David, el Baal Shem Tov, El Arí y, en nuestra época, El Rav.

¿Por qué tantas personas escuchan a estos hombres? Porque ellos han hablado desde el corazón. Sus intenciones eran y son congruentes con sus palabras. Aun si alguno de ellos tuvo problemas de tartamudez, como Moisés, separararon las aguas del mar y han influído en las naciones.
Sin embargo, al mismo tiempo han existido hombres con inteligencia similar cuyas palabras no han podido influir en las personas. Eso es lo que pasa cuando las palabras salen de tu cabeza y no de tu corazón.
¿Desde dónde hablas tú?Hoy, presta atención no sólo a lo que dices, sino de dónde provienen tus palabras.
Yehuda Berg
__________________________________________________

__________________________________________________
Algunas personas cuando empiezan a estudiar Kabbalah llegan a creer que esto se va a contraponer con su formación espiritual, o que quizás es faltar a su religión.
La verdad es que yo no crecí con una formación religiosa muy dogmática o muy cercana a alguna iglesia, pero en mi casa de quien se hablaba era de Jesus.
Así, tuve las enseñanzas del ejemplo de la vida de Jesus, de sus palabras, de lo que predicó y su mensaje.
Lo que puedo decir a quien pudiera tener ese temor, es que por favor no se aferre a eso, que suelte ese miedo ya que el mensaje medular "Ama a tu prójimo como a ti mismo" es el que ilumina desde el origen de los tiempos y no se contravienen en nada, sino que es la continuidad en las aguas de un mismo río.
Kabbalah es el origen, de ahí se nutrió el resto de las vertientes, judaísmo, islamismo, catolicismo, y en realidad cuando estudias Kabbalah lo que ves es el cimiento original de lo que has creido hasta hoy, las cuales son palabras de unidad, de amor incondicional, de volver a ser como D-os en la generosidad en el ver por los demás. Son palabras del corazón, por eso resuenan tan fuerte cuando las escuchas.
Todos somos aguas de un mismo río. No hay separación. No hay un D-os diferente para unos u otros. Kabbalah es la casa en la cual todos somos bienvenidos, un corazón único bombeando Luz de sabiduría, para todos sin distinción.
Cariño,
Prana Pascual