Martes 16 febrero 2016.
Los niños aprenden con el elejmplo. No les enseñamos con lo que decimos, sino con lo que hacemos.
Karen Berg
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Una manera muy pura de aprender esa de seguir el ejemplo ¿No crees? Ya después nos empezamos a hacer bolas con "es que él me dijo" "....si pero hizo lo contrario...." "si pero es que dijoooo"..." si pero no coincide con la acción...." y ahí nos podemos quedar ciclados.
Es fácil ver la acción y aprender, más allá de que entendamos la intención primera, observas e imitas, es muy poderoso.
En este caso la porción de Tetzaveh, que es la que estamos recorriendo nos presenta un líder que actua lo que dice, como lo decimos en las empresas un ejemplo de "walk the talk" caminar lo que dices, poner el ejemplo con tus acciones:
Después de la caída del Becerro de Oro donde las dudas les ganaron a los niños de Israel, el Creador dijo que los destruiría, que iba a empezar de nuevo y que sería a partir de Moisés.
Al escuchar esto, Moisés le dijo, si eso es lo que quieres hacer, a mi bórrame de tu libro.
Moisés no estaba por el orgullo de ser, sino porque tenía la responsabilidad hacia los israelitas y de transformarse todos en el proceso, no se trataba de llegar el solo y de ser él quien sobresaliera.
Esta es una semana en la que nos pueden asaltar las dudas, que podamos creer que todo lo que hemos hecho no cuenta o que nos sintamos confundidos.
Moisés efectivamente no es mencionado en toda la porción pero esto lo hace aún más presente porque no se dejó ganar por el ego de ser él el único elegido "el bueno ante los ojos de Di.os".
Esta semana es un buen momento para aclarar cuando estamos trabajando para nuestro Ego y donde para nuestra transformación verdadera.
Quizás la elección tenga que ser observada con lupa: ¿Esto es realmente por lo que yo he trabajado hasta aquí o es una solución que simplemente me ahorra el trabajo de hacer algo que de verdad me vuelva otra persona de ahora en adelante?
¿A donde te lleva cada decisión?
¿Vuelves a la caja o sales de ella? Por eso es tan importante plantearse una meta. Una meta clara.
¿Solo quieres sobrevivir o quieres vivir de verdad?
Me encantaría decirte que la respuesta es fácil. No. ¿Tienes clara tu meta?
Moisés si la tenía, por eso pudo decidir y porque no alineó su emoción a la respuesta más fácil.
Tenemos "chamba" por delante querida Comunidad. No sólo ustedes, por supuesto yo también.
Atentos.
Prana Raquel Pascual
Psicoterapeuta Gestalt
