viernes, 4 de junio de 2021

Cortocircuito

 

Ya que hablamos del ejemplo del foco, sigamos apoyándonos un poco más en él. 

En términos kabbalistas al polo positivo se le denomina Columna derecha, la inteligencia de nuestra alma de compartir. Deseo de Compartir

El polo negativo (que no es que sea malo) representa en términos kabbalísticos la Columna Izquierda o Deseo de recibir. Todos tenemos deseo de dar y también deseo de recibir. 

¿Dónde entramos nosotros humanos? En la resistencia. 

El Zohar (El libro principal de la Kabbalah) se nos habla en algún momento de unos hermanos muy famosos: Esaú y Jacob, ambos hermanos gemelos hijos de Isaac y Rivka. Uno era cazador y tenía un deseo de recibir muy grande y el otro era espiritual, generoso, en su caso, con un deseo de compartir igualmente grande. 

El que era Cazador llegó un día muerto de hambre y su hermano estaba cocinando una sopa de lentejas Esaú le pidió de su sopa. 

Jacob le dijo “te lo vendo por tu primogenitura”. 

Para Esaú el razonamiento fue: “Como soy cazador y vivo en el campo seguramente me voy a morir antes de tiempo” y le vendió la primogenitura sin dudar siguiendo su impuso de hambre inmediata. 

Casi la única historia que se cuenta de los primeros sesenta años de la vida de estos hermanos, es esta cuando el cambia toda su herencia por un plato de lentejas. Vendió barata su herencia espiritual. El sería el que conservaría el linaje espiritual desde Abraham, pero ni lo pensó. Eso es lo que es lo que nos pasa a nosotros cuando no hacemos restricción con tal de recibir rápido una satisfacción. 

Cada vez que que quisimos satisfacción a corto plazo, satisfacción sin proceso, sin esfuerzo hacemos este corto circuito. Unimos el polo negativo al positivo sin resistencia y ¿Qué sucede? Un chispazo, un CORTOCIRCUITO. En términos espirituales sacrifico la plenitud duradera que estoy buscando, el foco que me pudo dar luz por mucho tiempo, se funde. 

No se trata de no tener el plato de lentejas sino de tenerlo y tener la primogenitura. Es decir, tener todo.

Ser la causa es cuando hay restricción. Cuando no voy a seguir mi secuencia robótica de reacciones Cuando me pregunto ¿Cómo puedo ser Creador en esta situación? 

Restricción no se trata de no pasar por procesos, decir “un segundo, no voy a ser reactivo a como pasan las cosas” y en ese stop está todo el secreto. 

Hacer restricción tiene que ver con algo en nuestra consciencia. Parar y pensar ¿Cuál es mi reto?. Cual es mi reacción emocional “un segundo... ¡tengo una opción!”.

El tema de la restricción es clave para nuestro desarrollo espiritual. Si siempre actúas impulsivamente, si no haces pausa para reflexionar y disparas tu acción sin meditar ¿Qué hay realmente ahí para transformar tu reacción automática? Pierdes la prueba que te dará un crecimiento.

Reflexiónalo. Shabbat Shalom

Prana Raquel Pascual - Coach - Psicoterapeuta

Basado en clases de El Rav Berg / El Centro de Kabbalah Internacional

Imagen https://www.tecsaqro.com.mx/cortocircuito-1/