domingo, 3 de octubre de 2021

El precio de la indolencia

 

En arameo el nombre Noah significa estar cómodo.

Quizás pueda sonar deseable vivir cómodo emocionalmente hablando, pero en realidad puede tener un costo muy elevado en cuanto a tu desarrollo personal y espiritual.

Hay que identificar y digerir, que no podemos hacer progreso espiritual mientras permanecemos dentro de nuestra zona de confort, cuando buscamos la salida más fácil para todas las situaciones, gratificando a nuestro ego en lugar de ceder a los anhelos de transformación de nuestra alma.

Estamos en el libro del Génesis, en la porción de Noah (traducido como Noé) y en uno de sus primeros versículos recibimos el coraje y la determinación de transitar por el camino espiritual que a menudo es incómodo pero que nos lleva hacia la plenitud duradera, no cómo un premio, sino por la profundidad con la que logra transformarnos, inevitablemente nos lleva a ello.

Los sabios nos enseñan que Noah tuvo el lamentable honor de que este diluvio que destruyó a los habitantes del mundo recibiera su nombre porque no logró sentir el dolor de sus semejantes que estaban destinados a morir en las crecientes aguas.

Aunque Noah sabía intelectualmente que sus oraciones y sus lágrimas no alterarían el destino de la humanidad porque había muy pocas almas justas en su generación, aun así, se hubiera sentido verdaderamente el dolor del mundo, debería haber clamado en protesta.

El crecimiento espiritual implica sentir el dolor de los demás.  Si experimentamos genuinamente la angustia de aquellos que nos rodean nunca podremos infligir dolor sobre ellos.

La conexión con este verso abre nuestro corazón al sufrimiento de la humanidad, se encuentre cerca o lejos y nos abre los ojos a la insensatez de lastimar a otro ser humano.

Gracias a esa "indolencia" (la desconexión emocional) de Noah hacia el proceso de los otros, tuvo que regresar a encarnar tiempo después en Moshé (Moisés)…Supongo que alguna vez te habrás preguntado ¿Qué hizo Moisés para tener que atender el proceso de toda una generación? Si no tuviéramos esa referencia pensaríamos que ni locos nos someteríamos a las quejas constantes y sube y bajas emotivos de "los niños de Israel". La corrección que tuvo que hacer con esta información nos resulta clara.

Feliz domingo 

Prana Raquel Pascual - Psicoterapeuta - Coach

Texto basado en La Biblia editada por El Centro de Kabbalah porción Noah

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