martes, 3 de enero de 2012

MARTES 3, ENERO 2012, Algo sobre la porción de Vayechi

Buenos días querida Comunidad del Blog, hoy aún no hemos recibido la Afinación de nuestro Maestro Yehuda, así que trabajaremos un poco en un mensaje para nuestra consciencia, propia de la porción que estamos recorriéndo esta semana ¿Les parece? :)

Pues bien, de los apuntes tomados de en el Centro de Kabbalah les comparto:

Como sabemos, en esta porción "Y vivió", Jacob deja el plano físico...quizás nos puede parecer extraño que justo se llame así cuando alguien fallece, pero no es el único momento en que esto nos es transmitido en la Torah ¿Recuerdan la porción en que Sarah deja el mundo material? Justo se llama "Las vidas de Sarah", "Chayei Sarah"... :) Algún mensaje nos querrá transmitir que realmente estaban más vivos entonces que antes, y que el valor verdadero de sus vidas estuvo basádo en su trabajo espiritual y toda la Luz que ese día se revela al concluir el ciclo del cuerpo físico. Estar vivo es estar consciente y ellos lo estuvieron constantemente.

Pues bien, me explican mis Maestros: Cuando Jacob murió, "los ojos de Israel fueron cerrados".

Jacob vivió en Egipto hasta los 147 años (17 de ellos ahí,en Egipto) y cuando se dio cuenta que tenia que dejar el mundo llamó a sus 12 hijos y a cada uno le dio una bendición. Cuando le tocó a Yosef le pidió que trajera a sus hijos es decir a sus nietos y en vez de dársela a él, se la dio a ellos.

Yosef siempre estaba compartiendo por eso Jacob sabia que la bendición más grande que le puede dar a alguien es que los demás estén bien, eso es lo que hace feliz a un faro de luz y su dolor es que el mundo no esté bien. El orden en que los bendijo es particular puesto que cruzó sus manos antes de hacerlo, puso la mano derecha en el menor Efraín y la izquierda en el mayor Menasche y les dijo la oración que aún antes de ponernos el hilo rojo. Pero de esta bendición hablaremos en otro momento, ahora hablemos algo de las de los otros hijos de Jacob:
Las bendiciones de ellos suenan raro, ya que suenan más como regaños que como algo bueno, por ejemplo una de ellas es:

“Eres un idiota, una basura y que te coman los lobos en el bosque” (¿¿??)

Aunque nos suena extrañísimo, realmente lo que sabemos es que la bendición consistía en que les estaba dando la fuerza de pasar por el exilio (Nosotros estamos en el exilio), este era el regalo más grande, el poder pasar por cualquier dificultad exitosamente.

Jacob representa la columna central por tanto es el que nos da la fuerza de resistir, poder pasar por dolor, saber esperar saber que detrás de los retos vienen milagros, viene bendición. Toda la vida de Jacob fue un proceso doloroso.

Otro regalo que nos dan al escuchar la porción de esta semana, es la fuerza de pasar por los tiempos difíciles.

Nosotros no sabemos que son los tiempos difíciles verdaderos, lo que es consumirse por tiempos de verdad difíciles. Lo que estemos pasando en realidad no es nada de lo que el Oponente quiere para nosotros. (HBS)

Lo que nosotros queremos es protección del caos de verdad, no del caos sencillo, por ejemplo desastre naturales que acaban con millones en minutos.

Cuado Jacob estuvo en Egipto, Yosef era el Primer Ministro, pero cuando muere, inicia una etapa distinta de los israelitas en Egipto: pasan a ser los esclavos.
La bendición que estaba dando a sus hijos era la bendición de regañarlos. Les da la bendición de protección de todo en la vida; mientras Jacob vivió, era él el que los protegía porque siempre les estaba señalando su basura. La última bendición que se le ocurrió fue mostrarles lo egoístas que eran para que se ocuparan de ver adentro y estuvieran conscientes de su basura, y se protegieran.

El secreto de la historia de Jacob cuando vence al ángel negativo y que le pregunta como se llama y el le responde “¿Porqué quieres saber mi nombre?” es que el Satán no quiere que nunca sepamos donde está, pero cuando logras estar consciente de tu egoísmo es decir de encontrar a tu Satán, estás protegido.

Escuchar esta porción en Shabbat da esta protección, se leen estas bendiciones de los hijos de Jacob. Si por algún motivo no asistes a escuchar la lectura de la Torah, por favor date cuenta de cual es el trabajo de esta semana...¿Sabes por qué? Porque estamos a punto de entrar en el exilio, en el siguiente libro de la Biblia: El Éxodo.

Queremos estar preparados ante la vida. Es en el desierto donde de verdad empieza el trabajo espiritual.

Volverte dueño de tu consciencia, te da claridad de lo que causas, por tanto tus efectos no pueden ser negativos. Eso queremos. Protección.

De verdad vivir, de verdad estar despiertos de consciencia, y si es posible, contar con un amigo espiritual que siempre te esté apoyando a ver donde anda tu Ego.

Queremos entrar al desierto sin que nos falte agua, ni comida, ni se gasten nuestras ropas, con nubes que nos den sombra...pero darnos cuenta de ello, no sólo ver "¿A quien se le ocurrió la grandiosa idea de que nos salieramos de Egipto?" ja ja ja que fue lo que les pasó a ellos (que somos nosotros mismos).

Va a comenzar la expedición. Tomemos todas las provisiones de consciencia que nos ha brindado el Génesis. Tenemos un año gregoriano nuevecito frente a nosotros para caminarlo.

Alistémonos. :)

Feliz martes.

Prana Pascual
Basado en clases de Vayechi de mi Maestro Ariel Grunwald y mi Maestro David Benzaquen.