jueves, 14 de diciembre de 2023

Permitir el proceso de otros


En esta porción semanal de Miketz, El Faraón, el rey de Egipto "descubre" a Yosef y lo nombra sobre toda la economía de su reino de la noche a la mañana. También cambia el nombre de Yosef a "Zaphenath Pa'neach, que significa "el que explica las cosas ocultas". La ironía, sin embargo, es que Yosef expone la sabiduría y la solución al Faraón, mientras elige mantenerse "oculto" de sus hermanos.

Recordemos que durante el periodo de Yosef se da la hambruna generalizada que el había pronosticado con el sueño de las vacas flacas devorando a las gordas.

La hambruna se esparce por toda la región, y sólo se puede conseguir comida en Egipto gracias a la previsión propuesta por Yosef.

Diez de los hermanos de Yosef vienen a Egipto para comprar grano; el más joven, Benjamín, se queda en casa, porque Iaacov teme por su seguridad. Yosef reconoce a sus hermanos, pero éstos no lo reconocen a él; él los acusa de espías, insiste en que traigan a Benjamín para probar que ellos son quienes dicen ser, y pone prisionero a Shimón como rehén. Más tarde, los hermanos descubren que el dinero que pagaron por sus provisiones les es misteriosamente devuelto.

Jacob accede a enviar a Benjamín sólo después de que Yehuda asume una responsabilidad personal y eterna por él. Esta vez Yosef los recibe amablemente, libera a Shimón, y los invita a una elegante comida en su casa. Pero luego introduce su copa de oro, supuestamente imbuida de poderes mágicos, en la bolsa de Benjamín. Cuando los hermanos parten a la mañana siguiente hacia su casa, son perseguidos, revisados y arrestados cuando se descubre la copa. Yosef ofrece liberarlos y retener sólo a Benjamín como su esclavo.

Toda esta presión es la que logra que los hermanos hablen acerca de lo que había sucedido con Yosef en el pasado, que ellos habían sido responsables de venderlo como esclavo y por supuesto a pedir perdón para que no fuera Benjamín quien pagara por ello.

Aunque Yosef sabía todo, no se precipitó a revelarlo a fin de que el proceso fuera natural en los hermanos, que existiera esa revisión de consciencia en si mismos, no solo castigar sin que realmente hubiera aprendizaje.

Miketz -o "al final"- es lo que sucede al final de una historia, después de un largo proceso de altibajos, desafíos, pruebas y superaciones.

En el texto, Yosef finalmente es testigo de cómo las visiones de su vida se hacen realidad después de años de lucha y desgracia, y enfrenta uno de los mayores desafíos durante un momento como este: ser capaz de demorar la acción para permitir que ellos hicieran su corrección.

Esta idea es muy importante porque aprendemos una gran lección de Yosef. Mostró humildad, pero también les dio a sus hermanos la oportunidad de aprender lecciones haciéndoles responsables de sus acciones. Yosef tiene cuidado de no disminuir la oportunidad de internalizar sus propias malas acciones. Y lo que parece arrogancia, en realidad es un tremendo acto de respeto, que permite a sus hermanos ganarse el final de sus propias historias.

¿Dónde privas a otros de hacer lo mismo?

Ruth Rosemberg / Prana Raquel Pascual / Chabad.org en conjunto para generar el texto.

Imagen https://sephardicu.com/torah/miketz/