La orden Lej Lejá, “ándate”, pudo haber sido expresada en una sola palabra, “Lej”, que quiere decir “anda”.
Al agregar la
palabra “Lejá”, implica nos solo “ándate”, sino también anda “hacia ti
[mismo]”. O sea, se trata aquí del objetivo de llegar y conectarse uno consigo
mismo, con su propia esencia.
“ Si quieres lograr tu libertad
personal, tienes que liberarte primero de tres cosas que te limitarán,
englobadas en las palabras hebreas de “Artzejá” (tu tierra), “Mimoládetejá” (de
tu lugar de nacimiento) “Umibeit Avija” (de la casa de tus padres).
La palabra “Eretz”, tierra, está relacionada, etimológicamente, con la palabra “ratzón”, deseo.
“Moladetejá”, tu lugar de nacimiento
que representa los hábitos que uno tiene arraigado desde chico.
“Beit Avija”, casa de tus padres, se refiere al intelecto, ya que, según los kabbalistas, las dos facultades Jojmá y Biná, Creatividad y Análisis, están denominados “padre” y “madre”, respectivamente, ya que son los dos poderes intelectuales que engendran a los “hijos” de ambos, o sea, las emociones.
Es decir, la instrucción de Lej Lejá puede indicar salir de los deseos reactivos que hemos tenido hasta ahora determinados por nuestros hábitos aprendidos que nos dejan en la conformidad, y de las emociones reactivas.
¿Qué te parece esta perspectiva de Lej Lejá? ¿Cómo vas con el proceso? ¿Cómo lo vives con el Lej Lejá de otros a tu alrededor?
Prana Raquel Pascual
Basado en el texto de https://www.jabad.org.uy/templates/articlecco_cdo/aid/2357713/jewish/Lej-Lej-Los-Viajes-de-Avraham-en-el-Siglo-XXI.htm
Imagen https://againstthecompass.com/es/dejar-tu-trabajo-viajar-mundo/