miércoles, 2 de octubre de 2019

Resistir la tentación



Ok, ya pasaron los dos días de Rosh Hashaná, pero que nadie baje la guardia porque aún nos falta mucho por trabajar.

A partir de Rosh se cuentan diez días para que sea Yom Kipur, uno de los días más importantes en el ciclo de trabajo espiritual puesto que como lo mencionamos estamos en un proceso de generar las tres columnas que siempre mencionamos en Kabbalah.

Para quienes no tengan mucho tiempo de estudiar Kabbalah, siempre hablamos de la columna de Dar, la Derecha que habla de la misericordia. La columna de Recibir, la Izquierda que es la de la estructura, la de los límites y la columna Central, que es realmente lo que consideramos resultado de el trabajo del libre albedrío que nos convierte en humanos y esta le llamamos la Restricción.

La columna Central es la que puede permitirnos elegir y decidir aún ante un impulso muy fuerte (resistir la TENTACIÓN)...¿por qué? 

Porque la consciencia es lo suficientemente consistente como para que aún si tenemos un intenso llamado de comer un pastel de chocolate, podamos resistir y no hacerlo si estamos comprometidos con un régimen alimenticio en particular. Todo lo que puedes hacer que no te lleve a un precipicio de algo involuntario que tiene gran poder de atracción pero que sabes que al final te hará sentir más mal, eso es tener columna central.

Preservar una relación tóxica, un consumo de sustancias dañinas y adictivas, conductas de auto-lesión de cualquier índole, pueden ser evitadas si desarrollamos esa columna central.

Pero bien de Rosh a Yom, lo que estamos haciendo es construir la Columna Izquierda: El Deseo.

Nuestra meta final es generar la columna Central, sin embargo, sabemos que primero que nada, los humanos por ser manifestación o efecto de El Universo (Di-os, El Creador), primero somo VASIJA y hasta después podremos comenzar a pensar en dar y mucho después en restringir, así que por eso empezamos en este orden.

Estamos concentrados en la capacidad de recibir, en tener deseo, ganas, inspiración divina y para ello lo que es importantísimo es que comprendamos que estos diez días vamos a ser retados por los eventos para demostrar que ya cambiamos, que de verdad estamos dispuestos a ser una nueva vasija.

En términos kabbalistas diremos "No te bajes de Binah", es decir, con el trabajo de Rosh nos elevamos para que nuestra vasija esté pura y limpia, muy parecida al origen del deseo cuando aún no conocía de envidia, de ambiciones egoístas.

Pensemos en Adán y Eva antes de la caída, por supuesto comían y disfrutaban del Jardín del Edén, y no tenían ninguna noción del mal...Podríamos decir que de eso se trata en estos días, de no asociarnos con la idea de Mal, sino de que todo es bueno, especialmente en el área que hayas estado trabajando con más intención durante Elul: todo es bueno, aunque tendrás --posiblemente-- muchas razones para volver a "morder la manzana y caer" en conductas anteriores.

Tu mantente en consciencia de que todo es Luz y procura actuar como si fueras tú en tu mejor versión porque esa es la carta que escribimos solicitando que esos cambios sean permanentes y por tanto que nuestros efectos puedan cambiar y nuestra vida tomar otro rumbo.

Así que repite conmigo: "No te bajes de Binah" :-)

Feliz día Comunidad

Prana Raquel Pascual
Psicoterapeuta Gestalt & Coach