viernes, 5 de junio de 2020

Perder para Ganar


Encontré esta frase entre las clases de la porción de la semana que dice: 

Todo, para que sea real en nuestras vidas, tienes que pasar por tenerlo, perderle y volver a luchar por tenerlo.

Reconocer que nada es nuestro.

Me quedo reflexionando en ello. En general nos cuesta trabajo comprender que el concepto más descriptivo de este plano de existencia, es llegar a generar el merecimiento de la Luz, hacer restricción, lo cual generalmente no podemos lograr en un primer intento, nadie es experto sin pasar por muchas equivocaciones previas.

Me recuerda el evento que pasó a una persona muy querida con la que estoy trabajando en su proceso personal, después de muchos momentos de frustración y enojo por cierto tipo de "bullying" amistoso que un amigo le hacía sin percatarse, y que ella aguantaba estóicamente para no molestarlo, hasta que un día estalló y le puso los puntos sobre las íes.

El gran descubrimiento fue, que una vez que lo hizo con claridad, y no reclamando con acusaciones (si con mucho dolor) pero expresándole lo que la estaba haciendo sentir de incomodidad y dolor...la persona se sorprendió, pero comprendió y modificó y la relación se fortaleció, muy contrario a lo que ella había creído que sucedería si se atrevía a manifestarse.

Estuvo dispuesta a perder, pero por el contrario el lazo se afirmó.

Se dio cuenta que las relaciones de confianza generalmente tienen que ser capaces de superar crisis y desacuerdos (ojo, hay niveles de bulliyng y de maltrato que no tienen por que ser tolerados porque son abusivos, no inconscientes como este que menciono), pero no hay quien dure en una relación en la que no deba poner límites sanos.

Ojo, no estoy invitando a pelear, es solo un ejemplo de perder para de verdad merecer. Hablo de pasar a un siguiente nivel de cercanía lo cual implica desacuerdo por el simple hecho de que no somos la misma persona. Hablo de atreverse a confrontaciones que generen entendimiento y claridad de lo que es importante para cada quien, sin lo cual, no se puede pasar a un siguiente nivel de aprecio por la relación.

En este mundo estamos vulnerables, si no lo fuéramos hasta cierto nivel, jamás abriríamos suficiente nuestras cáscaras para entrar en contacto con los demás.

¿En qué lo puedes notar ese subir de nivel en tu vida? 

¿Cuando algo ha valido la pena tanto, que vale más tenerlo al 100 o mejor no tenerlo? 

Te invito como siempre a reflexionar Comunidad

Prana Raquel Pascual
Coach de Vida y Carrera | Psicoterapeuta