sábado, 3 de agosto de 2019

Constante movimiento



Los kabbalistas frecuentemente aparecen hablando al tiempo que van viajando o caminando. 

Eso no es casual, es una manera de enfatizar que nuestro proceso es como un viaje, nos trasladamos de un lugar emocional a otro, de un estadio de nuestra vida a otro, de niños a adolescentes, de adolescentes a adultos, aunque ocasionalmente podamos experimentar regresiones a "lugares" por los que ya habíamos pasado y que no pensamos que íbamos a tener que volver. Por algo será. Hay que poner atención a ello.

Querida Comunidad: Vale la pena ocuparse de esos retrocesos --no necesariamente asustarse-- pero si, la vida es cambio, es transformación y es movimiento, no necesariamente siempre vamos hacia adelante, aunque ahora a todo mundo le guste afirmar que "para atrás ni para tomar vuelo"...lamento informar, las vueltas en el desierto a veces son circulares, a veces vas de regreso, a veces caminas hacia los lados, ninguna trayectoria humana es recta y sin escalas.

Masei son los viajes del alma para llegar a gobernarnos a nosotros mismos, para que no sea nuestra reactividad la que nos dirija... al menos, no siempre :-)  me encantaría decir que nunca, pero los humanos no somos taaan estables.

Recuerdo lo que mis Maestros me decían, el proceso espiritual te ayuda a que lo que eran “picos de emocionalidad excesiva”, se vuelvan “ondas menos pronunciadas”, que no sea ya una montaña rusa de emotividad, sino un viaje por colinas, si hay sube y bajas, pero no tan extremos...Aunque claro, quizás algún día llegarás a otro Everest que rete tu ecuanimidad, está bien...está bien si sabes que no puedes quedarte a vivir ahí, habrá que moverse también.

¿Qué te hace reflexionar esto con respecto a tu proceso?

Shabbat Shalom

Prana Raquel Pascual
Psicoterapeuta gestalt & Coach.

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