jueves, 28 de agosto de 2025

Todo en uno y al mismo tiempo


No es extraño que estemos recorriendo esta semana Shoftim, una lectura bíblica que nos invita a la vigilia de nosotros mismos, al examen de nuestros motivadores, de nuestros puntos ciegos, de esos juicios dichos fácilmente acerca de otros. No es extraño puesto que ya que estamos en los inicios de este mes llamado Elul (Virgo), que es el mes de la revisión concienzuda de nosotros mismos.

La gente del signo Virgo normalmente percibe los mínimos detalles, quizás por su tipo de enfoque no capten tan fácilmente "los bosques", pero si cada árbol y sus detalles.

Los Virgo son gente que puede ser minuciosa y que gusta de hacer esas cosillas que a otros nos parecen indiferentes e incluso insulsas, pero que a ellos les parecen apasionantes porque captan la importancia específica de cada detallito y su peculiaridad y que de lo pequeño emerge lo grande en este reino material.

El tema es que este mundo, a pesar de su inmensidad, está hecho de minucias, de polvillos, de granitos y eso es lo que ellos notan: la mini-mónada que conforma al infinito.

Cada ser está hecho de piececillas cada vez más minúsculas y cuya colección genera hasta a seres tan grandes como los elefantes y ballenas, o tan complejos como los pulpos o los humanos, hechas de apenas cigotos o y piececillas aún menores que eso, que multiplicándose entre si generan estas organizaciones estupendas.

Pero bueno, Elul no nos pide ir necesariamente a la mirada de la dimensión atómica, pero si a la de las bases de nuestra conducta, misma que es hija de nuestras emociones, sentimientos, y pensamientos expresados como creencias, introyectos, interpretaciones, aprendizajes, eso que a fin de cuentas genera nuestra realidad, al menos la que nosotros declaramos como tal, aunque en este mundo nada sea tan absoluto, y mucho menos una opinión. Recordémoslo, lo que cada uno declaramos nuestra realidad es apenas eso: una de las muchas interpretaciones posibles, pero la que más nos satisface en este momento de acuerdo al nivel de consciencia que tengamos desarrollado.

Elul es el mes conocido para hacer Teshuvá, es decir la revisión de nosotros mismos y de nuestros agravios, en dónde nos hemos desconectado de la compleja simpleza del Creador (si te suena contradictorio es porque así se experimenta), de dónde hemos generado caos para nosotros mismos y para otros.

¿De qué manera tú eres responsable de tu estado actual? Cuesta trabajo asumirlo pero es verdad: eres un actor, testigo, juez, auditor y restaurador de ti mismo y mucho más, todo en uno y al mismo tiempo.

¿Tienes caos? ¿Cómo te has permitido llegar hasta aquí? Teshuvá es el ejercicio de ir desandando el camino en una revisión paciente y sin prisa de cómo constelas tus confusiones y tus incertidumbres, yendo hacia atrás en el tiempo hasta donde ya no haya nudos, y de ahí, volver al futuro-presente (hoy siendo el futuro de tus ayeres), hacia la claridad.

Obsérvate ¿Cómo has llegado hasta aquí?

Prana Raquel Pascual -Psicoterapeuta Gestalt

Imagen https://creavalencia.com/blog/etapas-desarrollo-embrionario/