Todo en lo que no estas cumpliendo tú
potencial es llamado el exilio, representa esas cosas en las que no estamos bien afinados y que queremos estarlo, lo que venimos a ser, pero no somos aún.
Estamos a punto de terminar el libro del Génesis que como bien sabemos, tiene las bases de la consciencia con la que deberemos contar en el trayecto que sigue hasta llegar a Israel, no sin antes atravesar el desierto, de entrar en exilio. No será lo único que deberemos de aprender, pero sin las bases previas de el libro que estamos acabando, no habrá vasija suficiente.
Muchas lecciones de lo que deberíamos de contar como leyes del Universo, iniciativa, sabiduría y entendimiento para resolver lo que venga, ya las hemos encontrado en las porciones de Bereshit (El Génesis).
Otra cosa importante es saber ya no viajamos de manera unitaria, sino que ya la misión se ha repartido entre las tribus.
Esta semana Jacob (Israel) muere en el plano material, no sin antes otorgar las respectivas bendiciones a cada una de estas doce tribus de Israel, incluidos en ellas, Menasche y Efraín (hijos de Yosef), en lugar de Yosef y de Levi, Yosef porque se eleva a nivel de Patriarca por sí mismo en el Árbol de la Vida, y Leví a quien no se le asignó territorio, sino que se dedicó al culto del Templo, y por tanto fue la única tribu no territorial de Israel.
Veremos que pertenecemos a cierto grupo con cierta misión dividida entre los doce signos del zodiaco (pero sin olvidar que es una misión compartida de ser como Di.os y elevar el plano físico en el que habitamos y a toda la Creación) y que eso aunque nos facilita poner foco, también nos indicaría que estamos conectados y que no hacer lo que nos corresponde, afecta a otros que dependen de alguna manera también de nuestros avances.
En este libro veremos que a veces no estar donde se debe o no tener, es a veces tan importante como si estar o si tener. Cuando no estás en un lugar en que puedas manifestar tu potencial, muchas veces te dará la fuerza necesaria para que crezcas y para sacar lo mejor de ti.
Una claridad que debemos cultivar cada vez más, es que nadie viene a ser simplemente pleno y feliz a la vida gratuitamente, sino que venimos a ganarnos esas posibilidades, venimos a aprender a recibir la luz y a compartirla sabiendo que hay para todos y que todos tenemos que aportar nuestra parte con dicho fin.
¿Qué estás dispuesto a hacer para transformarte en esta consciencia pensante y sintiente que ponga su aportación en el mundo en lugar de tan solo estar esperando que todo se le de sin merecimiento alguno?
Feliz martes Comunidad
Prana Raquel Pascual - Psicoterapeuta - Coach
Imagen https://es.wikipedia.org/wiki/Tribus_de_Israel
