viernes, 27 de octubre de 2023

Aprender a volar

 


Se dice que las aves le enseñan a volar al pichón a través de la separación progresiva. Cuando lo alimenta, el ave adulta ofrece la comida cada vez un poco más lejos para motivar al pichón a dejar el nido y arriesgarse a volar. Nosotros los humanos no somos muy distintos en este aprendizaje de abrir nuestras alas. Si tenemos suerte, tenemos fuertes figuras parentales que nos ayudan a crecer, madurar y volvernos adultos. Una vez que ya actuamos por nuestra cuenta, solemos necesitar motivarnos a salir de nuestra zona de confort y expandirnos hacia nuevos horizontes. En la vida, necesitamos crecer constantemente o corremos el riesgo de estancarnos.

Esto es lo que sucedió a Avram y a Sarai, porque no podemos dejar de mencionarla también a ella quien salió junto con él e hizo el trabajo de elevar almas a su lado. Como vemos, también en su evolución cambió su nombre de la i al final de su nombre a tener la Hei, misma letra que se intercaló en el nombre de Abraham) posteriormente a Sarah. La Hei tiene un significado espiritual de Revelación Gracia y Aliento.

Es significativo que notemos que el cambio llega hasta en cómo nos nombramos, no es obligatoriamente un cambio de país. Es verdad que hay gente que adopta nombre espirituales para apoyar el cambio de energía o y por tanto, de destino, pero si tu nombre te sienta y no quieres hacer ese movimiento tan drástico, al menos mira cómo te nombras cuando hablas de ti mismo.

¿Cómo te refieres a ti cuando estás molest@? ¿Cómo te concibes a ti mismo?

Míralo, Abraham quiere decir Padre de Muchos (de toda una humanidad). Sarah quiere decir "Princesa". Isaac  quiere decir "El que rie" porque su madre se rio al escuchar la profecía de que a los 90 años de edad sería madre, Rivka (Rebeca) en algunas fuentes dice que significa "Conexión", Jacob quiere decir talón, el que sostiene y cuando cambio a Israel el significado cambió a La cabeza (aquí hay varias versiones, también está Quien lucha con Di.os) y así podríamos ver que nadie en la BIblia está nombrado al azar y todos tienen una intensa conexión con su rol espiritual.

La gran reflexión es que no estamos aquí, en esta travesía humana para quedarnos iguales ni para quedar estáticos. La vida hay que recorrerla y dejarla que en el transcurso nos esculpa con maestría para sacar de nosotros, nuestra mejor versión, por ello las palabras de la Maestra Karen Berg me parecieron conmovedoras para este día. Tenemos que aprender a volar, ser capaces de crecer y arriesgarnos constantemente para encontrarnos con quien tenemos potencia de llegar a ser.

Shabbat Shalom al ser visibles las tres primeras estrellas en el firmamento nocturno y meditemos por quienes requieran de un enorme apoyo en estos días.🙏

Prana Raquel Pascual - Psicoterapeuta

Itálicas https://www.kabbalah.com/es/articles/learning-to-fly/

Imagen https://coompy.es/como-le-enseno-a-volar-a-un-pajaro/