Impaciencia, un dolor común entre la humanidad.
Todos mundo queremos la fruta dulce pero no todos sabemos cultivarla ni esperar por ella.
En esta porción de la Biblia Avraham tenía 99 años y Sara su esposa 89 cuando el Creador les informó que serían padres de un varón.
La razón de que el anuncio se diera con anticipación fue para sembrarles certeza, que sin ella, no hubiera sido posible la manifestación.
El gran balance en nuestras vidas está entre saber hacer todo lo necesario, tener deseo y entusiasmo por lo que queremos manifestar vs la desesperación.
Hoy veo mucha gente que literalmente "se le queman las habas" para ser ya directores, o famosos, o millonarios, o algo que lleva tiempo, sin acciones de adquirir experiencia y en ello queman oportunidades porque creen que ya lo merecen, que ya se les hizo tarde.
Es curioso, conforme más pasa la vida más veo que la edad no es el impedimento, el impedimento es nunca haberte planteado, que lo que tenías que cambiar era tu entendimiento de "éxito", y lo que se debe hacer para cultivarlo.
Éxito no es sinónimo de dinero, casas, fama, aunque tampoco está peleado con ello, sin embargo es más una sensación de haber sido capaz de descubrir tus patrones no coadyuvantes, vencer las taras que parecen salir en el camino y muchas veces caer en a tentación de "auto-explicarse" con creencias limitantes el por qué no debías (según tú), ni siquiera de intentar andar rutas que no exploradas, o desarrollar características de comportamiento o de manejo emocional aún no visitadas.
Esta porción habla de que los decretos nunca son definitivos y que aunque las condiciones parezcan adversas o contrarias, no es así si se hace el trabajo de transformación correspondiente, y se tiene la ya muy mencionada en este blog: ardiente paciencia :-) esa que anhela con enorme deseo pero que también logra hacer la restricción que genera vasija para recibir, un fuego que no quema, pero que sublima.
Feliz día Comunidad
Prana Raquel Pascual
Imagen https://es.wikipedia.org/wiki/Mechero_Bunsen
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