Decía Shimon Sarfati: la gente vive como si no fuera a morir, y muere como si no hubiera vivido.
Si creemos que el dinero puede comprar todo nos equivocamos.
¿Qué nos llevamos con nosotros? Lo que transformamos lo que cambiamos.
La porción que estamos recorriendo se llama Korach y justo este personaje era el más rico de los israelitas.
En hebreo incluso hay un dicho que cuando quiere referirse a alguien con mucho dinero le menciona: "es rico como Korach". Este hombre tenía todo pero--infelizmente-- alguien le hizo pensar que eso no era suficiente y empezó a querer el lugar de Moisés.
Sabemos que las consecuencias de la historia fueron drásticas: Hubo un temblor, la tierra se abrió y se devoró a Korach y a todos los rebeldes que se le unieron.
¿Por qué?
Por la envidia.
Esta es una porción increíble, fue cuando yo me di cuenta que el código de la Biblia está completamente vivo y es el hilo conductor de nuestras vidas.
Esta semana observemos donde hay celos, donde hay envidia o donde nos sentimos que merecemos y que ello nos hace sufrir de cierta carencia.
No podemos dejar de ver esto porque son aspectos de nuestra personalidad que solo nos traen oscuridad.
Identifica donde tu tienes una sensación de vacío o de que "algo te falta...", muy seguramente ahí en vez de revelar Luz, la estás queriendo consumir de quien sea y como sea....y eso trae caos ya que empiezas a sentir ira, reactividad, malicia, depresión y ganas de arrebatar energía de alguna manera.
Observa: el pasto del otro no es más verde por naturaleza que el tuyo, aunque quizás lo esté cultivando mejor.
Fíjate que necesitas hacer para ser mejor jardinero de tus regalos de vida.
Prana Raquel Pascual
Con apoyo de la sabiduría compartida en El Centro de Kabbalah Internacional
Imagen Google
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