Los niños tiene este deseo de recibir para sí mismo,pero el trabajo en la vida es transformarlo en deseo de recibir para compartir.
En esta ocasión Karen trabaja con el Nombre de Di.os Ayin Ayin Mem, Pasión, la cual no sólo es la sexual, sino la de unos por otros, de tener logros.
Durante la meditación nos invita a buscar la pasión, la motivación para hacer cosas no sólo para nosotros mismos.
Puedes tener todo lo que quieras en este mundo siempre y cuando estés también siempre dispuesto a --felizmente-- dejarlo ir.
Karen hace hincapié en hacer el ejercicio de revisar donde nos sentimos víctimas y de cómo justificamos a nosotros mismos en nuestro deseo de recibir para nosotros mismos: "Tuve un mal día así que ahora puedo gritar a todo el mundo y sentirme bien por ello"....por poner un ejemplo.
Ahora observa de esto cómo te quita tus chispas de Creador gastando tu energía en eso.
La Teshuvá es eso, restaurar esas chispas que has regalado al Satán.
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Pues bien, vemos que todo finalmente se reduce a la administración de la energía...suena simple, pero no nos lo resulta tanto porque claro, tenemos la fuerza de nuestro Oponente, y la idea de que no podemos cambiar...es sólo una idea...pero una persistente.
Hace un par de días, tuve lo que puedo llamar "un ataque de pasado". ¿Te ha pasado?
Le llamo así a que de pronto tuve la sensación de miedo al experimentar que todo está muy bien... pero que en el código del sistema de mis creencias (obsoletas) se pasa por el filtro de "too good to be true", demasiado bueno para ser cierto o demasiado bueno para durar... Miedo a que el paraíso se convierta de nuevo en un infierno... ¡Ni Di.os lo quiera! o.O
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Si trabajas, si trabajas genuinamente en transformar, no tienes porque regresar al caos. Pero si, los humanos estamos susceptibles a la caída de la consciencia y esa es nuestra lucha de cada día. Perder el paraíso, Ganar el Paraíso- Perder el Paraíso - Ganar el Paraíso...hasta que un día vemos que todo está en nuestra mente.
Pero ojo: El tema, no es caer, ese no es el problema, sino darte cuenta que te caes y poder (y elegir) levantarte; de hecho parte del mecanismo de caída es poder regresar por las chispas de Luz que dejaste ahí tiradas...hacer consciencia del evento de apego al mal que estás presentando y regresar con la claridad de que esa no es nada más que una creencia inmovilizante...y que puesto que es tuya, puedes cambiarla.
No sin esfuerzo claro está, para ello es justo que Karen está dirigiendo ejercicios de auto-observación. Si no los estás pudiendo escuchar los vídeos, no te apegues a la idea de que no puedes trabajar por eso...por favor. Claro que puedes, claro que te demanda un poquitín más de esfuerzo y deseo, pero claro que puedes, aquí tienes los elementos que necesitas.
Después de la meditación Karen pide que escribas. La verdad yo también lo sugiero siempre. Nada más pensar corres mucho el riesgo de que con lo escurridizo de la memoria, mañana ya no te acuerdes bien de un pensamiento super clarificante de hoy. Así que inviertele energía cinética (de movimiento) y alinea tu mente y tu mano, agarrados de tu alma y corazón y escribe.
Sigamos pues revisando en estos cuatro aspectos de víctima- victimario que nos desconectan, hemos estado trabajando la Idolatría. Nos faltan tres: Adulterio, Mala Palabra y Derramamiento de Sangre.
Vamos a Derramamiento de Sangre que es seguramente uno que causa más extrañeza, porque la mayoría de nosotros suponemos no haber hecho algo así en nuestras vidas. Te tengo noticias. Tu verás si si o si no una vez desarrollado el concepto:
Cualquier acción con la que humillamos a alguien, tanto que hasta la sangre viene a su cara (hacer que alguien se avergüence tanto que la sangre le haga ruborizarse).
Cuando en cualquier área de la vida somos insensibles, y cuando no
tomamos las oportunidades de compartir.
¿Ahora te suena más? ¿Quien no ha humillado a otra persona? ¿Quien no ha permitido que lo humillen? ¿Quien no ha faltado a la dignidad de alguien incluso en bromas o comentarios que parecen simpáticos pero que en realidad son mordaces y le han hecho verdadero daño? ¿Quien no ha reprendido a alguien enfrente de otros?
Todos seguramente tenemos de esos momentos en que hemos traído a la cara de las personas una oleada de sangre que le ha hecho querer hundirse por debajo de la tierra...o nosotros nos hemos permitido que nos hundan. Todos hemos peleado y ofendido.
¿Tienes recuerdos al respecto? Generalmente los hacemos porque había un deseo de recibir para nosotros mismos ahí oculto, no creas que estamos trabajando opuestos a Karen.
Toda TODA desconexión humana, parte desde lo más profundo, en un deseo de recibir egoísta, sólo para nosotros mismos. Queríamos todo el reconocimiento, queríamos todo el poder, todo el triunfo, todo lo que estaba en juego etc. Y bueno, si con ello teníamos que suprimir a alguien...parecía...mmm...necesario... (¿?)
Mmmm
Creo que seguimos teniendo trabajito que hacer :-) je je
Todos estamos en ello ¿Seguimos?
Prana Raquel Pascual
Psicoterapia Gestalt & Desarrollo Humano
