Piensa en una persona de tu pasado que lastimaste y pídele su perdón.
Karen Berg
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"El primero en disculparse es el más valiente, el primero en perdonar es el más fuerte y el primero en olvidar es el más feliz".
Esta es la traducción de la imagen que les comparto el día de hoy, que lamentablemente no trae al autor para poder decírselos, pero sin embargo, cualquiera que hayamos pasado por la amarga sensación de necesitar desesperadamente un perdón, ya sea que lo requiramos para nosotros mismos o para otorgarlo, sabrá que es estar como secuestrado en un infierno que nos inmoviliza y nos deja ciclados en esa misma idea: ¿Por qué...por qué?
Pero en realidad todo tiene su utilidad en este mundo y debemos decir que aunque no promovemos para nada la culpa en Kabbalah, muchas veces se necesita pasar por ese sentimiento para después transmutarlo en algo que se llama arrepentimiento genuino y esperamos que llegue a transformación.
Ninguno de esos dos (culpa o arrespentimiento) es un estacionamiento de largo plazo, sino lugares de paso para reposar y meditar apenas un tiempo y recapitular y buscar enmendar y restituir el orden y la armonía. El estar completos, o diríamos mejor, sentirnos como tal.
La culpa desintegra, pero sin embargo tiene el suficiente poder de incomodidad para propulsarnos hacia una nueva acción, distinta y en diferente sentido a la que habíamos promovido antes.
Si, jamás verás a ninguna persona realmente espiritual a impulsarte a que vivas con culpa, pero sabemos que los sentimientos no están pidiendonos opinión para entrar en el marco de nuestra alerta diaria, simplemente emergen del campo de las posibles emociones humanas y se hacen presentes con esa sensación de fuego con la que se ha descrito ya en muchas maneras en la humanidad al infierno.
Lenguas de fuego que abrazan pero ni matan ni consumen del todo, solo dan la dosis suficiente para atormentar.
La culpa no es un buen hogar para vivir, pero con la gasolina que dan hay que buscar inmediatamente transmutarlas en responsabilidad, y esa responsabilidad en nuevas acciones nutridas por un nuevo entendimiento de nosotros mismos y del entorno.
Pensando en que estamos trabajando para Rosh Hashaná, yo volveré a recomendar que escribas.
A mi me es mucho más fácil así recapitular la cantidad de cosas que observo durante el mes de Virgo y que no quiero perder en el flujo de la corriente de eventos y memorias que vienen incesantemente.
Te sugiero que estos días no leas el blog sin tu cuadernito al lado para que vayas anotando tus reflexiones. En estos días hemos hablado de: los deseos no revelados aún, hemos hablado de los miedos que nos separan de ellos y por tanto de mejores manifestaciones en nuestras vidas. Hamos tratado temas que armarán la imagen completa de lo que estamos revisando de nosotros mismos y que tienen diferentes nombres.
Hoy es este tema, la culpa, la responsabilidad y la capacidad de perdón y olvido...y por sobre de todo, el entendimiento instalado para ser ya una persona diferente de aquí en adelante.
Ayer explicaba Shimon en una gran clase: Hay tres elementos que necesitamos para transfomrar en este tiempo de oportunidad: teshuvá, tefilá y tsedaká
Teshuvá muchas veces lo entendemos como arrepentimiento, pero digamos que ese es solo uno de los componentes. Podríamos decir que es mucho más profundo que eso y compete esa consciencia del dolor que hemos causado, pero no solo eso, sino realmente tratar de abarcar en nuestro entendimiento ¿Por qué hice eso? ¿Qué me motivó? ¿Cuál fue la semilla original de que yo hiciera algo que pudo lastimar? ¿En qué aspectos lastimé a otros? ¿Cómo lo podría reparar?
Y si, es aprovechar la comprensión más allá de lo material de que el tiempo es una ilusión y entonces comprender que si puedo enmendar, si logro estar por encima de esa tara que llega a ser ver la unidad fraccionada en "presente, futuro y pasado". Si corrijo algo, si lo visualizo y logro pasar por todo el proceso emocional de reparación y enmendar y ser otro al final del proceso, puedo realmente curar la herida, porque todo tiempo es ahora pero yo debo ser genuinamente otra persona. Esto es trabajar teshuvá, pero si necesitamos dedicar un buen tiempo en nuestro famos cuadernito.
Puedes tener más de una persona con quien tengas que llevar a cabo este ejercicio. comienza a documentarlo. Empezarás a entender más de ti mismo y conforme entiendas más los fenómenos en los que has estado involucrado con ira y encono, envidia, celos, crítica, agresión etc. más verás donde estás llamado a ser diferente.
Incluye en tu lista no sólo a las personas a quienes crees que lastimaste, incluye también a los que crees que te han lastimado. Esa también será una fuente muy importante de detección de tu ego y de tu comprensión de la anatomía de tu Oponente y cómo es que le encanta atraparte.
Feliz día Querida Comunidad.
Prana Raquel Pascual
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Tuesday, September 2
Think about one person from your past that you hurt and ask that person for forgiveness.
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