JUEVES 4 DE MARZO DE 2010
Nos gusta comparar nuestra vida con aquéllos que pensamos que tienen una vida mejor que la nuestra. Sin embargo, olvidamos que hay mucha gente que nos mira con envidia.
Hoy, cuenta tus bendiciones para que puedas apreciar las cosas que tienes.
Yehuda Berg
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Ayer Shimon nos contó la historia de un hombre que estaba empecinado en encontrar a Di-os, quería verlo a como diera lugar, no dejaba de rezar todo el día y de implorarle y rogarle que se manifestase ante el. Dejó de relacionarse incluso con el resto de la gente para solamente estar pensando en Di-os y como verle.
Un día, decidió subir a la montaña más alta. Con grandes esfuerzos alcanzó la cumbre y desde ahí, desde la soledad de aquel remoto lugar cayó de rodillas implorando "¿Donde estás Di-os? ¡¡Dejame verte!! ¡¡Soy tu siervo más leal, he venido hasta acá en tu búsqueda!!
De pronto una voz desde lejos, muy lejos, desde muy abajo de la montaña se oyó una voz, la voz de Di-os que le decía..."Estoy acáaaaa...entre la gente"
Di-os está en la vida de cada uno de nosotros, está en nosotros. Gastas tu tiempo cuando miras desesperadamente hacia algún otro lugar que no sea tu propio corazón para encontrarle.
En esta semana estamos atravesando la porción en que los israelitas se desconectan de la consciencia de la Luz cuando Moisés se va a traer las tablas de la ley.
Lo que Moisés iba a traer era la claridad del concepto de inmortalidad, de continuidad, del concepto de muerte de la muerte, es decir la consciencia de que todo es Uno y es infinito y todo lo demás que percibimos con nuestros sentidos es el espejismo contra el que batallamos de que hay separación o espacio entre las cosas o entre nosotros, o entre la vida y la muerte.
¿Recuerdas cómo es que se desconectaron? Fue a través de crear un ídolo, un Becerro de Oro que era una especie de ser sin alma al que le podían consultar y les contestaba de inmediato pero con consciencia robótica.
Esa idolatría es la que nosotros tenemos al dejarnos llevar por la realidad del 1%, la del reino de nuestros cinco sentidos en lugar de la comprensión de la unidad del 99%, el mundo infinito.
No prestes el oro de tu alma para hacer un becerro de oro buscando cómo o donde encontrar la conexión que ya tienes desde siempre con el Creador.
Mira tus bendiciones.
Prana Pascual
Imagen: "Caminante sobre un mar de nubes", de Caspar David FRIEDRICH (1818)
