Guevurah
de Guevurah
Me parece que la disciplina, la severidad, la estructura, es un bien que tenemos mejor calificado en nuestra mente que en nuestra acción. A veces pensamos que está bien, pero que el amor puede más.
Como ayer vimos, si, la razón de que sea necesaria la estructura o la construcción de vías específicas de entrega de la Luz, es para que el amor tenga un cauce que permita realmente los mejores resultados, sin embargo en la vida real, me parece que tenemos una muy escasa fortaleza para disciplinar sin pensar que estamos "traumatizando" o causando daño al educando, seamos nosotros dicho educando u otro a quien tenemos que marcar los límites y no permitir berrinches sin sentido.
Berrinches es la palabra que me parece interesante hoy de explorar siendo que estamos en la Segunda semana del Omer y que son ocho días que son una semana y dos días del Omer.
Guevurah de Guevurah es el aspecto del alma que estamos llamados a desarrollar el día de hoy, disciplina en disciplina.
Ejecutamos limitación en exceso? Obsesivamente, tanto que limitamos el aporte creatividad y experiencia aplicada en nuestras interacciones o somos laxos e irreflexivos sin que importe el resultado en nuestras relaciones (aplica a afectivas laborales o de cualquier otra índole)
¿Me exijo a mi mismo o no me gusta ya que nadie opine o me exija más de lo que quiero y me es cómodo dar? ¿Pienso que de verdad tengo estado del arte en todo lo que hago y por eso no admito ningún llamado de atención o requerimiento que se sale de mis límites establecidos?
Dejo de exigir aún cuando se que aún no estamos en la calidad que se requiere? ¿Tolero el procastinamiento o la baja calidad en lo que me tienen que dar?
Todo esto son preguntas que trabajan este aspecto y se pueden hacer tanto de mi hacia otros o de otros hacia mi.
Hoy es un día muy importante ya que puede establecer cuales serán mis criterios acerca de la calidad y la excelencia en lo que se logre a fin de cuentas como resultado de cualquier proceso.
A trabajar Comunidad
Prana Raquel Pascual
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