JUEVES, 10 DE MARZO DE 2011
A veces, no sé qué es peor: no tener lo que quieres u obtenerlo.
El día de hoy, piensa sobre aquello que quieres; y luego piensa nuevamente.
Yehuda Berg
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Mmm
Como saben, a mi me gusta preguntarme temas de lo humano y tratar de comprobarlos en mi propia psique, así las entiendo mejor al ver la psique de los demás, lo cual espero algún día me permitirá trabajar para un bien común directamente con consultantes, y también aquí proseguir, --como desde hace ya algunos años-- con la Comunidad del Blog, desarrollando juntos una sabiduría de lo cotidiano: Yehuda, mis pensamientos y reflexiones, más las tuyas. Tres elementos que esperemos estén balanceando nuestras vidas.
A ver, reflexionemos:
"Obtener algo", no me parece mal, aunque entiendo que al obtener, lo que te pasa es llenas la vasija y el deseo se ve saciado. Llega una satisfacción, pero hay un punto imprescindible que debe estar cubierto....la sensación de merecimiento de lo obtenido.
Es siempre muy importante, que recordemos un propósito básico de nuestras almas: venimos a corregir el pan de la vergüenza y cuando esto no sucede, se disparan cualquier tipo de consecuencias en la emocionalidad de las personas: surge enojo, surge frustración, surge culpa, rompimiento de relaciones...la gama de lo humano que está catalogada como "oscura".
Como estudiantes que somos, debemos estar siempre muy alertas a observar y a corregir antes del desbarranco. Rápido. Ahi está la maravilla de saber, tratar de ver cuando vas a preferir "no obtener" que "obtener"....unos minutos antes de la caída y aún poder decidir.
Espero estar haciendo un punto claro...si no, abundo en el tema:
¿Te has visto frente a una enorme rebanada de pastel que extiende sus encantos hacia tus sentidos "cómeme" "cómeme"...y esto sucede justo cuando estás iniciando la dieta?
O cuando se te pone una persona similar a la de tus sueños justo en el momento que estás dando el "si acepto" ...a otra persona? ja ja, como una trampa mandada a medida.
Yo soy muy observadora de la vida, a veces peco con ello, de pensar más que de vivir. Trato de llegar con el manual leído, en vez de ser un poquitín más espontánea y eso me ha frenado de algunas vivencias, pero estando aquí y ahora, sentada en frio, escribiendo en la compu, no puedo dejar de remitirme a la vida real...pero desde un lugar seguro lo cual estoy segura me ha salvado de varias =)
Sigamos reflexionando:
Tu cuerpo va caminando con la potencia de la vitalidad.
El cuerpo quiere experimentar, tocar, sentir, degustar...el Alma debe ir un poquito por delante haciendo el "scouting" (la exploración previa)...tratando de revisar las condiciones del territorio que va a recorrer el cuerpo, que no se está preguntando "más nada" (como dicen mis amigos colombianos). El cuerpo dice "Voy derecho y no me quito".
El cuerpo tiene una fuerza por sí mismo que "desea para sí mismo", y tendrá la pulsión de buscar satisfacción "sí o si".
El Alma tiene que desarrollar la capacidad de hacerse escuchar por el cuerpo...¿Es buen momento de recibir...o aún no? Esa es la capacidad de la restricción.
¿Y porqué el Alma es tan aguafiestas? Podremos preguntarnos...y entonces te diré: Porque el cuerpo es la ficha en el tablero. El Alma es quien de verdad está jugando el partido.
Sabe que si deja que a tu "corporeidad" caiga en la zona del tablero marcada con "serpientes", después del gusto, vendrá el susto. El Alma puede preever, el cuerpo no.
El Alma no está procurando que no haya satisfacción, no es eso, sin embargo, está procurando que caigas en los espacios del tablero marcados cómo: "Escaleras", es decir, que sea sin efectos secundarios y puedas de verdad experimentar plenitud al obtener, y no la oscuridad de tener que pagar un precio excesivo por un impulso de obtener fuera de momento.
Piensalo en cualquier materia de tu vida en la que "desees": algún logro de negocio, de trabajo, de tu vida sentimental etc.
Manda a tu Alma a verificar el terreno antes de seguir adelante ¿Es terreno seguro? ¿Tienes ya bien ganado lo que puedes obtener? ¿Te esforzaste? ¿Tomaste tus precauciones? ¿Tendrá más consecuencias que puntos a favor?
Acuerdate que "causa y efecto", no tienen horario de apagado. Tu siembras causas, cosechas efectos. Funciona las veintucuatro horas de cada día, los 365 días y fracción de cada año. No hay días libres.
El cuerpo no es tan inteligente para distinguir el peligro de recibir sin merecimiento, pero tu alma sí.
Espero que si estás en alguna situación que amerite que detengas el paso y veas con la inteligencia del Alma antes de caerte al pozo del "deseo de recibir para sí mismo", aún estés a tiempo de prevenir.
Espero no haber estado muy confusa el día de hoy...pero por favor, trata de comprender mis palabras, para que no tengas que enfrentar efectos secundarios o colaterales en ningún aspecto que la luz de tu consiencia tenga la capacidad de abarcar.
Deseo que lo hayas escuchado con tu Alma.
¡Feliz día!
Prana Pascual
