Riesgo Sin Cálculo. Octubre 15, 2008.

MIÉRCOLES 15 DE OCTUBRE DE 2008. ¿Quieres realmente sentirte bien hoy?

Dile a alquien que te importa algo que siempre has deseado decir pero no sabías cómo. Sabes a lo que me refiero, algo riesgoso.

Hoy empújate a ti mismo al filo emocional. No calcules el riesgo. Olvídate del resultado que deseas y abre tu corazón. Ésa es la forma de destruir la ilusión que te separa de Dios

Yehuda Berg

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Kabbalah dice que a los doce años de las niñas y a los trece de los niños, se recibe la parte final del Alma y por eso se realiza el Bar Mitzvah.

En este momento lo que se hace es entegar la responsabilidad de su vida al niño(a) y se le retira a los padres (en el sentido del libre albedrío no la de cuidados, manutención, cariño etc.)

Sin embargo yo no recuerdo tanto mis doce como mis trece años.

Recordando aquel tiempo, a los trece hubo una serie de descubrimientos pesonales para mi, difíciles de creer, un día vi mis labios en el espejo y no sabía que esa boca era mia, me pareció linda pero completamente desconocida, mis manos que se hacía largas etc. También recuerdo que después de que durante la última fase de la infancia repetía constantemente la frase "yo no quiero crecer", cuando vi que era inevitable, la suplí por la frase: "Tienes que ser valiente", y la repetía como un mantra para convencerme de algun valor que no sabía para que iba a necesitar.

¡Y lo necesité!

Con la vida, he seguido con mi mantra. Muchas veces en bajito la pronuncio "Tienes que ser valiente" y me lanzo a la carga en lo que se deba enfrentar.

Varios años después, cuando vi la película "Los Puentes de Madison", uno de los íconos fílmicos de mi vida, al ver esa escena bajo la lluvia en que ella tiene la mano en el picaporte y va viendo al amor de su vida alejarse porque ella no tuvo el valor de reclamarlo--quizás por otro tipo de valentía-- yo me prometí a mi misma que nunca dejaría pasar algo importante que decir y mucho menos relacionado con mi felicidad, llorando en la despensa. No por mi causa al menos.

Hoy, he decantado cada palabra que he tenido que decir. No ha habido miedo alguno que me detenga por duro que haya sido y me he vuelto clara para hablar como un día a la luz del amanecer. Difícil no saber lo que quiero decir con la capacidad que desarrollé cuando necesito que llegue la idea. No ha sido fácil.

....Mmm. Quizás -"importante"- sólo tengo algo que no he dicho ni en tiempo ni a la persona indicada...no es ni muy grave, ni muy pesado, simplemente es algo bochornoso. Veremos que pasa a lo largo del día. ; ) ooops!

Bueno y sólo para cerrar... la frase clave de la película =)

"Sólo lo diré una vez, no lo había dicho nunca antes, pero esta clase de certeza se presenta sólo una vez en la vida."

¡Wiiii, me levanté romántica! :O) ja ja ja

besos,

Prana Pascual