jueves, 9 de febrero de 2017

El maná del cielo.

En esta semana se comienza a hablar de un concepto muy interesante para nuestras vidas, me refiero a la historia del maná. 

Nos cuentan nuestros Maestros que durante el tiempo de los israelitas al estar en el desierto y después del éxodo, el principal alimento que obtuvieron fue el maná del cielo.

¿Cuál era el maná del cielo? Era el alimento que venía del nivel metafísico pero se manifestaba en el nivel físico. Lo que era especial sobre esta comida era que cualquier cosa que los israelitas quisieran degustar en esa comida, era posible. Si querían que fuera un bistec, lo era. Si querían que fuera un vegetal, lo era. Si querían que fuera helado, lo era. Simplemente no parecía tan atractivo como los diferentes alimentos.

Aquellas personas que no tenían certeza de que habría alimento:
1) no sabía si el maná vendría al día siguiente, y
2) pasaron tiempos difíciles incluso para imaginar la comida que querían, ya que no parecía tan atractivo como la comida que querían en su imaginación; Como resultado, no les resultó tan buena.

Aquellas personas que tenían la fe y tenían la certeza sabían que había comida ilimitada y eran capaces de apreciarlo. Llegaba justo frente de sus tiendas, era lo que querían, y siempre llegaba en el momento adecuado. No había miedo en sus corazones, y ni siquiera lo pensaban. Estuvo cuando lo necesitaban.


Aquellos que tenían el miedo y no la fe y la certeza, estaban siempre preocupados acerca de si iban a conseguirlo o no conseguirlo ... y entonces normalmente tenían que luchar e ir mucho más lejos para llegar a él que las otras personas que tenían certeza.

¿De qué te parece que nos está hablando la Torah?

¿Qué es el maná del cielo para nosotros? 

La mayor parte de los miedos que nos consumen no están en la realidad, no acontecen, es mucho más frecuente que sea nuestra mente la que nos tortura con historias tenebrosas del futiro, incluso podemos llegar a crearlas por que el miedo es tan grande que las concretamos tomando decisiones equivocas y erráticas basadas en nuestro deseo de recibir para nosotros mismos y sin restricción. Eso es lo que puede provocar que quieras arrebatar algo, apresurar, amenazar a alguien para obtenerlo. Esa es la fuente del caos.

Pero el maná es y si estás dispuesto a compartir a trabajar, a hacer restricción de tus temores, puedes encontrar siempre una buena puerta.

¿De qué te estoy hablando a ti personalmente? Todos tenemos nuestras fuentes de ansiedad en que nos permitimos naufragar.

Para y observa. Donde eres el que no logra apreciar el maná y por ello lo pierde de vista.

A corregir. Esta es una semana con la energía posible para percibir esto de distinta manera.

Feliz día Comunidad

Prana Raquel Pascual
Psicoterapeuta Gestalt | Coach

Basado en clase del Centro de Kabbalah Internacional Eitan Yardeni 2006

Imagen encontrada en https://palabradediosdiaria.wordpress.com/2012/08/page/3/

miércoles, 8 de febrero de 2017

Mares por abrir.


En esta sección de la Torah llamada Beshalach, veremos que después de la salida de los israelitas de Egipto, se encuentran en una situación que aparentemente no tiene salida: Se encuentran frente al mar, perseguidos por el Faraón y a los lados bestias salvajes...un escenario que podría parecer realmente irresoluble. Sin embargo, aprendemos algo importante y es que aún en esas situaciones,podemos accesar a leyes espirituales, no solo a las condiciones físicas.

Hay muchas cosas que aún no logramos comprender del todo como seres humanos, aunque estamos empezando a estar ávidos de entender más cada vez de los mundos espirituales. 

Nos explican los Maestros Kabbalistas que el mundo fue creado bajo ciertas "normas", algo que denominan Tanao (condición, por ejemplo, la ley de la gravedad que funciona claramente atrayéndonos hacia la tierra), sin embargo, si lográsemos llegar al punto antes de que la condición fuera impuesta, las cosas podrían actuar en contra de su naturaleza en este mundo terrenal. 

Y como eso, varias limitaciones que se tienen por condición pueden ser superadas, accesando esta consciencia de que existe esa posibilidad en mundos espirituales.

Tenemos que despertar a ver como hay situaciones que parecían imposibles de resolverse, que lo logran, características personales que nos parecían imposibles de modificar y que si se modifican.

Hay mucho que aún no entendemos pero que ya podemos atisbar que están disponibles si tenemos esta capacidad de tocar a la puerta de los milagros a parir de volvernos conscientes de ellos y afines a partir de nosotros mismos cambiar nuestra naturaleza con nuestro libre albedrío.

Todos tenemos mares rojos en nuestra vida, mares que pueden abrirse...¿Cual es la clave que tienes que usar para que se abran? De entrada, creer que es posible.

Te dejo reflexionando acerca de esos mares que seguramente identificas que pareen tenerte atrapado en alguna "condición" 

¿Cómo podrás solucionarlos?

Feliz semana Comunidad

Prana Raquel pascual
Psicoterapeuta Gestalt | Coach
Foto tomada por ppascual febrero 2017