lunes, 26 de octubre de 2020

La primera gran prueba


En esta semana, leemos la porción llamada Lej Lejá, que nos da continuidad con las historias previas que hemos leído de la Creación y de las generaciones de Noé, de los cuales Sem Jafet y Cam, eran hijos y tuvieron descendencia.

Y dice el texto de la Biblia: También le nacieron hijos a Sem (que da lugar al término semita), padre de todos los hijos de Heber (Ever), y hermano mayor de Jafet.

El nombre Ever, o Heber da lugar a la palabra ivrit que es la que antecede a la palabra que en español conocemos por “hebreo”.

Ivrit quiere decir “el que pasó al otro lado”

Bnei Ever es una de las formas en que se denomina en la Biblia a los hebreos, es decir “los hijos del otro lado”.

Textualmente podríamos pensar que son los que cruzaron el río, en este caso el Tigris y el Éufrates, y, sin embargo, sabemos que el código habla de algo más allá que la sola descripción de los actos físicos.

Avram, en ese momento aún sin la letra Hei intermedia en su nombre) cruzó mucho más que eso.

Avram (Ibrahim) cruzó diez pruebas, desafíos o dificultades con las cuales, pavimentó la posibilidad de vencerlas para las generaciones que le sucederían.

La primera prueba que enfrentó Abraham se encuentra en el primer versículo del parashá: "Lej lejá", ve para ti mismo.

Di.os le dijo a Avram: “Vete de tu tierra, de tu lugar de nacimiento y de la casa de tu padre a la tierra que te mostraré.

Te convertiré en una gran nación. Te bendeciré y te haré grande. Serás una bendición.

La primera gran prueba que Avram tuvo que enfrentar fue dejar la casa de su padre quien era un idólatra, el justo contrario de lo que Avram revelaría posteriormente para la humanidad.

La primera gran prueba fue diferenciarse de su padre, aprovechar sus recursos internos, descubrir su misión, y el propósito sublime de su vida.

Prana Raquel Pascual

Coach de Vida y Carrera – Psicoterapeuta Gestalt

Apoyos de contenido

https://www.aishlatino.com/tp/s/tora-para-tu-mesa/Las-pruebas-de-Abraham.html

https://es.wikipedia.org/wiki/Abraham

https://es.chabad.org/parshah/torahreading_cdo/aid/868087/p/1/jewish/Parash-con-Rashi.htm

Etimologías de Chile

Imagen Abraham contempla las estrellas, por Lilien, 1908


domingo, 25 de octubre de 2020

Dejar el nido

 


¿Recuerdas cuando decidiste salir de la casa de tus padres? ¿Cómo fue ese momento? ¿A qué obedeció tu decisión? ¿Con que consciencia lo hiciste? ¿Saliste feliz o por molestia?

Salir de ese primer hogar, haya sido como haya sido, es un paso mayúsculo en la psique de cualquier persona, es el momento en que te desprendes de las primeras figuras que marcaron tu destino, por su presencia o por su ausencia, por su amor o por cualquier otro estilo de crianza que hayan ejercido.

Esta semana estamos recorriendo la porción llamada Lej Lejá, que es cuando El Creador llama a Avram a dejar el hogar de su padre y le hace una serie de promesas de lo que eso significaría no solo para él sino para el mundo entero al que el influenciaría.

Aunque claro, no solo es acerca de dejar el nido, sino de madurar. Mantenernos en estado “niño” psicológicamente, nos priva de desplegar nuestro potencial.

Por supuesto todos conocemos algún caso (espero no tu propio caso, pero si así es, te sugiero comenzar ahora mismo a trabajarlo), que el cuerpo crece, pero que la persona aún no está asumida como un ser maduro o adulto en el sentido psicológico pleno.

¿Pero de qué hablamos al mencionar dicha plenitud? Pues entre otras cosas a contar ya con total responsabilidad personal establecida y reflexionada, las decisiones ya nos pertenecen, nuestras necesidades podemos ya satisfacerlas por nosotros mismos y en el mejor de los casos ya somos independientes en todos los sentidos posibles y solo mantenemos ciertas interdependencias sanas en lo emocional que nos dan pertenencia, pero no sufrimiento.

Alguien que aún no hace Lej Lejá puede seguir teniendo dependencias muy primarias y seguir incluso con reclamos muy primitivos de lo que los padres son o dejaron de ser, de lo que dieron o hicieron, o de lo que privaron.

Alguien que no ha hecho un buen Lej Lejá aún siente que su vida está anclada a aquel allá y entonces, más que poder estar aquí y ahora o proyectándose hacia el futuro que desea.

¿Cómo estás tú al respecto? ¿Hay algo que te falte de tu Lej Lejá?

Esta semana es una buena oportunidad para reflexionarlo y tomar decisiones sanas al respecto.

 

Prana Raquel Pascual

Coach de Vida y Carrera | Psicoterapeuta Gestalt

Imagen http://www.elportaldelhombre.com/con-hijos/item/332-el-nido-vacio-cuando-tus-hijos-se-van-de-casa