miércoles, 18 de octubre de 2017

El riesgo de los extremos

En esta semana llamada Noach (Noaj o Noé, como cada quien prefiera), es muy común que exploremos el tema de el Diluvio y su significado, sin embargo, esta porción habla también de otro evento muy importante y que tiene algo de gran interés para cada uno de nosotros en nuestra vida presente.

Me refiero con este preámbulo, al "episodio" por llamarlo así de "La Torre de Babel".

La segunda mitad de la porción habla de la construcción de esa torre, lo cual parece ser una narración rara. 

La historia habla de que después de que Noé y su familia sobrevivieron, la siguiente generación humana se movió al Este y empezaron a construir una torre tan alta, que llegara a los cielos.

Sabemos que estas personas a su vez, tuvieron su consecuencia, su "castigo", por llamarlo de alguna manera (aunque sabemos que es mejor llamarlo "efecto"), que fue la mezcla de lenguas, y así la lengua común de la tierra se confundió y se generaron distintos lenguajes por lo cual ahora no podemos comunicarnos libremente entre nosotros.

En estos momentos quiero poner la mirada en algo que me pareció sustantivo en la explicación de Ruthie Rosemberg: ¿Por qué castigar el poder de Unidad que tuvieron estas personas para generar esta torre que llegara directamente hasta los Cielos? ¿No es parte de la meta el llegar a la Unidad entre los seres?

En realidad la Unidad es una maravilla, al igual que si lo pensamos, el Agua (retomando el tema del Diluvio también mencionado) es también el vehículo más puro de Luz en este mundo, la creadora de vida etc.

Es decir: dos elementos maravillosamente positivos...¿Vehículo de consecuencias muy serias y severas hacia la humanidad? ¿Cómo es posible?

En este caso te pido que pongas tu mirada en que en este mundo lo que realmente buscamos es la restricción, es decir el BALANCE en todo.

Aún el Agua como un bien supremo y la Unidad como una característica también esperada en la humanidad, llevada a su extremo, se vuelve negativa.

El agua en demasía adquirió ese poder destructor, y esta unidad que buscaba llegar al Cielo sin ningún merecimiento de hacer la transformación personal, lo que trajo fue caos.

Esto nos habla de que todos los extremos en nuestra vida nos desconectan de la Luz, más que unirnos a su plenitud.

Todo lo que implique un extremo eventualmente nos traerá caos: el trabajo en extremo nos volverá "trabajólicos", la comida en exceso a la obesidad y otros males, el optimismo ciego a caídas impensadas, el deseo desbordante por alguien a obsesiones, el amor sin restricción a des balances en nuestra conducta, nuestro anhelo de perfección a infelicidad, exigencias y abandonos, la búsqueda de espiritualidad exagerada a fanatismos e intransigencias.

Y como estos, cualquier número de ejemplos que podemos encontrar cuando en lugar de balancear queremos volvernos extremos.

¿Donde detectas en tu propio proceso estar en esa demanda de extremismo? 

Balancea, porque de lo contrario, el proceso se encargará de que experimentes efectos muy desagradables diseñados para regresar al justo medio.

A trabajar Comunidad

Prana Raquel Pascual
Basad en clase de Ruth Rosemberg 2012 Centro de Kabbalah Internacional
Imagen https://conmitogaymistacones.com/2014/09/09/interpretes-desmontando-la-torre-de-babel/

martes, 17 de octubre de 2017

Miedo a nuestra propia grandeza

Es interesante --por decirlo así y no de otra que nos ponga más nerviosos-- cómo se están manifestando todos los elementos en nuestro Mundo, ante nuestros propios ojos. 

Es verdad, siempre hay acción de "los elementales", aunque no siempre sus acciones son tan dañinas hacia la vida humana como las podemos estar percibiendo ahora: huracanes, tornados, terremotos y ahora incendios que están sucediendo en España y Portugal a gran escala.

Hay varias maneras de observar, aunque para decirlo más acorde a mi entendimiento, hay varios niveles de pensamiento, uno de ellos es el científico, el basado en la química, la física, que son absolutamente válidos y específicos, pero como también sabemos, como es arriba es abajo y hay dimensiones que tienen correspondencia también con niveles espirituales y de consciencia.

Viendo que tanto Aire, Agua, Tierra y Fuego han estado mostrando sus caras más destructivas pienso no sólo en el evento de la inundación por el Diluvio que nos cuenta la Biblia, sino en otro evento que leemos durante Yom Kipur, la historia de Jonás.

Jonás es un profeta mencionado en la Biblia el cual recibió la instrucción del Creador de ir a avisar a los ninivitas de que cambiaran su conducta negativa o los destruiría.

Se cuenta que Jonás se asustó de esa misión que le fue solicitada y se escapó, se subió a un barco y el Creador entonces mandó una gran tormenta que amenazaba con hundir la embarcación. Jonás supo que no haber cumplido con su deber era la razón de esta manifestación, por lo que pidió que lo lanzaran al mar donde fue tragado por un enorme pez. Ahí estuvo tres días y tres noches  y cuando decidió que llevaría a cabo su tarea fue escupido en la tierra donde pudo ir a cumplir lo encomendado y el pueblo de Nínive cambió y fue perdonado por el Creador.

Jonás ha dado lugar al nombre de un complejo: "El complejo de Jonás", titulado así por Abraham Maslow, quien lo describe como el miedo a nuestra propia grandeza.

¡Qué estaremos dejando de cumplir con nuestra Tierra y nuestros semejantes? ¿Puedes responder y asumirlo? Trabajemos en ello Comunidad.

Prana Raquel Pascual

Imagen encontrada:
http://www.tunuevainformacion.com/etica-filosofia-de-vida/450-jonas.html