Goi Kadosh

Vamos a estudiar un poco de la porción de esta semana que es llamada Behaalotjá:

Habían tres normas para ser un Sacerdote:

Ser un Goi Kadosh (nación o pueblo). Ser una nación de Santos.
El Sacerdote tenía que reconocer la negatividad que había dentro de él. Mientras más consciente de su basura interna, más espiritual. Aplica a cada uno de nosotros. Trabajar tu negatividad.

Mamlejet Cohanim.
Tomar la decisión de ser parte de un reino de sacerdotes. No tener propiedad privada: Nada es mío. Podían tener todo lo que quisieran, pero no como propiedad privada.

Am Segulá. 
Tengo que usar la Luz dentro de Mi. No solo ver mi negatividad sino ver mis talentos y usarlos. Son regalos pero es una responsabilidad usarlos.

No hay nadie de nosotros que no tengamos goi (Luz de negatividad y Am Luz positiva) y ambas las tenemos que usar para ser espirtuales lo cual significa estar dispuestos a transformarnos por decisión propia. No se trata de ser perefctos o de que así se nazca. Es un trabajo.

El cambio de consciencia no es solamente una alegría personal sino una necesidad.

Y este es un trabajo que esta semana es muy propicio hacer: ¿Tienes negatividad? Ser capaz de verla, reconocerla, nombrarla y trabajarla para llegar a transformar. 

No tomarte nada como propio.

Poner tus talentos al servicio del Mundo.

A trabajar Comunidad

Prana Raquel Pascual

Basado en clase del centro de Kabbalah 2013

Imagen encontrada en http://puliriaescrita.blogspot.mx/2011/05/barriendo.html

Participar

La porción que vamos a estudiar esta semana se llama Beha alot’cha

Hay varios regalos y mensajes esta semana, la porción tiene algo interesante habla de la construcción de la Menorá del candelabro de los siete brazos. 

La Menorá era un elemento importante. Todo mundo tenía que dar medio shekel para hacerlo.

Para nosotros, el mensaje es que cuando queremos hacer algo con la Luz nosotros debemos poner la mitad y la Luz la otra mitad.

La idea de ese medio shekel es acordarse de que yo solo puedo dar la mitad y la otra la da la Luz.

Somos seres que participamos en nuestro propio proceso, no podemos meramente atenernos a nuestros instintos a al destino que nos vaya sucediendo, sino qué, hay que poner nuestra decisión, nuestra actitud, nuestras acciones, nuestra voluntad, nuestra fuerza vital en lo que hacemos.

Piénsalo por ejemplo en tus relaciones más cercanas e incluso las que no lo sean tanto: Muchas veces estamos esperando que las cosas se desarrollen "por que si", o solo por afinidad o antipatía gratuita, pero eso puede ser distinto en la medida en la que nosotros ponemos de nuestra parte y damos una direccionalidad.

Todo lo que surge en este mundo tiene un proceso a desarrollarse, pero nosotros podemos intervenir con nuestra consciencia para que este sea perdurable o no, positivo o no.

No somos inocuos en ninguno de nuestros escenarios. La Luz pone su parte, pero nosotros tenemos también nuestro turno de participar.

No te abandones a la sola idea de "que sea lo que Di.os quiera", porque curiosamente y paradójica mente, el Creador lo que quiere es que nosotros también queramos y manifestemos eso que queremos. El deseo es una clave de operación en este Mundo, sin deseo, no hay nada.

Ojo...a veces, si no tienes claro el deseo, la guía puede ser ¡El desagrado!. El desagrado lo interpreto como un deseo a la inversa. Algo que no deseas debiera mostrarle algo que si quieres.

Pon atención cuando no estés aún claro de lo que quieres, el contraste también te puede servir de señal.

Feliz domingo Comunidad

Prana Raquel Pascual

Basado en sabiduría compartida por El Centro de Kabbalah Internacional.

Imagen encontrada en https://empresariados.com/los-mejores-libros-para-dirigir-negocios/