Lunes, 3 de diciembre de 2012
El Rav siempre nos decía que hiciéramos nuestro trabajo espiritual con pasión.
Él decía: “Deberíamos despertar como si el edificio estuviera en llamas y fuese nuestro trabajo apagarlo”.
Intenta literalmente saltar de la cama corriendo hacia la acción. Esto puede marcar la diferencia entre vivir un día una y otra vez por setenta años, o vivir setenta años en un día.
Él decía: “Deberíamos despertar como si el edificio estuviera en llamas y fuese nuestro trabajo apagarlo”.
Intenta literalmente saltar de la cama corriendo hacia la acción. Esto puede marcar la diferencia entre vivir un día una y otra vez por setenta años, o vivir setenta años en un día.
Yehuda Berg
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La característica de Jacob, es que su vida estuvo en constante reto y acción.
Explican mis Maestros que la naturaleza de Jacob era estar en su tienda estudiando, solo más que salir al mundo. Esau su hermano en cambio tenía la facilidad de salir, de ser hábil en las actividades externas, por eso, la manera en que Jacob tenía que demostrar su proactividad era saliendo de su casa a otras tierras, a trabajar lo que le daría balance a su naturaleza espiritual por excelencia. Un balance entre lo espiritual y la manifestación.
Hace poco escuchaba una clase en la que explicaban acerca de la diferencia de recibir de arriba y de despertar la bendición desde abajo. Por supuesto es una gran diferencia que algo te sea dado por la voluntad del Creador, a que tu despiertes la bendición desde este mundo de la acción, lo que se da fácil suele no apreciarse y se puede perder. La bendición que trabajamos, donde nos esforzámos, donde pasamos pruebas, esa bendición es duradera y podemos apreciarla en su justa medida ya que fuimos nosotros con nuestra restricción quienes la pudimos manifestar.
La restricción es hacer justo lo que está en contra de nuestra naturaleza reactiva. Realmente no hay nada más difícil de hacer en nuestra vida, eso es verdad.
La porción que estamos estudiando esta semana, se llama Vayeshev, que quiere decir "asentarse".
En esta porción, después de todo el esfuerzo, Jacob decide asentarse, de aguna forma se pone cómodo en algo que le era natural, pero es ahí cuando vuelve a empezar el Caos.
Cuando pensamos que ya no hay más que hacer, que ya quieres asentarte, es cuando tienes que estar activo por fuera, nunca retirarte, seguir trabajando, tener paz adentro. Eso da comodidad en el 99% aunque incomodidad en el 1%.
Eso es restricción.
¿Cómo se observa esto? Pues es ir en contra de la energía de ocuparnos nada más de nosotros mismos.
Desde el momento que llegamos al mundo, nuestra inclinación al mal nos está esperando. La del bien llega hasta después, el deseo de compartir llega hasta los doce años y la capacidad es elegir volverse Creador.
En esta semana es cuando tenemos que elegir entre esta "comodidad" y nuestra "incomodidad" que puede transformarnos.
No vemos las cosas cuando estamos cómodos, sino hasta que estamos incómodos.
Ante la noticia de la desapareción de Yosef, Jacob se sentó y perdió incluso su capacidad de ver el patrón más grande de la vida, lo que llamamos la película completa.
Si nos sentamos a simplemente no tomar acción, hay una desconexión, en este caso Jacob perdió el Ruaj a Codesh (Inspircaión divina o Espiritu Santo) que le permitiría ver que Yosef estaba aún con vida...
¿Donde nos estamos asentando? ¿Donde nos estamos poniéndo cómodos y aceptando mansamente algo como si fuera el estado último?
A trabajar Comunidad, no podemos sólo quedarnos con lo que nos sale fácil de nuestra naturaleza más reactiva y primaria.
Feliz día
Prana Pascual
(Meditación tomada de Secretos del Zohar, Idra Raba Verso 1 La batalla con el Oponente, no volvernos complacientes en nuestro trabajo espiritual.
Secrets of the Zohar Michael Berg)
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