domingo, 11 de junio de 2023

El famoso mal de ojo


Esta frase es clave para comprender muchas cosas en nuestra vida: 

"Cuando algo no llega a nosotros es porque no tenemos la vasija para recibirlo."

Por eso el trabajo espiritual es preparar la vasija, nunca será quitarlo a nadie más o envidiar a otro por si haberlo conseguido.

Esta semana estamos estudiando Koraj, una porción que habla de una insurrección de este personaje hacia Moisés. Es extraño, ya que Koraj era el hombre más rico entre los israelitas, parecería un sin sentido ¿El más rico de todos envidiando a Moisés que se estaba cargando a cuestas el proceso de toda la Nación?

Esa mirada que viene desde la carencia es a la que se llama Mal de Ojo y quizás habrá quien no crea en que algo así puede suceder, pero yo he visto casos de plantas que de estar en una maravillosa floración amanecen muertas cuando alguien las vio con envidia. 

Un tema central que debemos de aprender, es acerca de la malignidad que trae a nuestras vidas "el mal de ojo". Se trata de una acción que materializa la envidia que se genera a partir de una sensación de carencia, una mala intención que no es buena para nadie, ni para quien lo perpetra ni para quien es mirado con esa energía porque a fin de cuentas todos pierden. No por mirar con codicia lo obtienes y sin embargo si dañas lo que ves.😠

Lo que deseas puede no formar parte de tu modelo de vida. Insistiré: Cuando algo no llega a nosotros es porque no tenemos la vasija para recibirlo. Si tenemos alguna carencia o nos hace falta algo que queremos no es porque alguien nos lo haya quitado, es porque aunque llegue, seguramente o no lo notarás, o no lo apreciarás. Es más, a veces llega y se vuelve la razón de tu sufrir. ¿Cuánta gente desea pareja y cuando la tienen se dicen "tan feliz que era yo de soltero"? Absurdo.😖

Debemos estar conscientes de que pensar que nuestra carencia puede ser suplida por algo que alguien más tiene es el arma principal de Satán.

Reflexionemos.😉

Feliz domingo Comunidad

Prana Raquel Pascual - Psicoterapeuta Gestalt - Coach

Basado en https://www.kabbalah.com/es/articles/the-trap-of-the-snake/


viernes, 9 de junio de 2023

La famosa pregunta: ¿Qué hay aquí para mí?


¿Qué les pidió Moisés a las cabezas de la tribu cuando les envió a Israel?

Solo que trajeran los hechos. No les pidió ni un diagnóstico ni una estrategia.

Todos tenemos un lado inferior y un lado superior de nuestra alma. Está última puede ver la película completa.

En este caso, cuando los jefes de las tribus entraron a Israel, vieron a gente desarrollada que no necesitaban de jefes, y esto los confrontó. Se dijeron a sí mismos: "Trabajamos tan fuerte en el desierto para el bien común, y ahora todo se va a ir por el caño. Seremos como cualquier otro, no solo no somos jefes, sino seremos cualquieras".

Pasaron por la pregunta: ¿Qué hay aquí para mí? 

Cuando regresaron habían vuelto a su estado original de alma, la inferior, con la idea de que no contaría nada del trabajo que habían hecho durante la travesía en el desierto.

Cuando regresaron de Israel regresaron a su aspecto más bajo. La consciencia cayó y ya no estaban siendo neutrales. Calcularon qué les iba a pasar a ellos en lugar de ver la película completa de que se hubiera entrado a esa realidad superior. Todos hubieran entrado.

Pero torcieron la realidad a lo que pensaron que sería a "su favor" que si no entraban ellos seguirían siendo "jefes de", y lamentablemente le quitaron la oportunidad a toda esa generación de entrar a Israel, y ellos a fin de cuentas, perecieron en el desierto.

Leemos esto y podemos pensar que nosotros seríamos mejores que estos líderes, que nos podríamos mantener puros y neutros pero quizás tampoco lo hubiéramos logrado.

El interés propio es muy fuerte cuando se tiene un ego. Muchas veces en la vida podemos caer en esa falla de nobleza.

Reflexionemos acerca de nosotros. ¿Somos capaces de mantenernos neutros aunque sintamos que alguien más nos supera? ¿Si veo que el alumno puede superar al maestro? ¿o nos será más importante el status o los títulos nobiliarios y los privilegios?

Suena fácil pero no lo es. La humildad por su simpleza, es de lo más complicado de lograr en nuestro desarrollo de alma.

Shabbat Shalom Comunidad, al ser visibles las tres primeras estrellas en el firmamento nocturno.

Prana Raquel Pascual - Psicoterapeuta Gestalt - Coach

Basad en clase de Ruth Rosemberg 2017

Imagen https://sefarad-asturias.org/blog/parashat-shelaj-leja-el-peligro-de-hipotecar-la-mirada/