Estamos recorriendo la porción llamada Shmini o Shemini, en la cual el pueblo de Israel había estado ocupado en la inauguración del tabernáculo, el Santuario en el desierto, y primera morada oficial de Di-os en la tierra.
Fue una semana de
consagraciones y ofrendas, pero todavía no había señal del Cielo. Aarón, el
Sumo Sacerdote, estaba decepcionado. El asumió que era su culpa, debido a que,
de alguna manera, él había permitido el pecado del becerro de Oro en ausencia
de Moisés.
Al ver esto, Moisés
hizo una plegaria especial y entonces descansó ahí por fin la Shejiná, el
aspecto femenino de la Luz (lo que yo entiendo como la Providencia en otros
contextos), es decir la Luz que cuida a los hijos de Israel, provee y protege de todo
mal y entonces todo estuvo listo.
Moisés fue el canal
original que construyó la vasija para que Aarón y sus hijos la usaran como
Sumos Sacerdotes. Shemni quiere decir "octavo", ya que los otros
siete días prepararon las siete primeras dimensiones, desde Maljut hasta Jesed
para que pudiera descender. La octava séfira o dimensión se llama Binah que
es conocida como el almacén que reserva toda la energía, también es comprendido como el lado izquierdo del cerebro, el que nos da la razón para desarrollar ideas plenamente organizando las facultades del cerebro para poder tener resultados concretos. Es el entendimiento, que no es simplemente fe ciega, sino que implica comprender. Todo esto se enciende, todo esto está a nuestra disposición si nosotros encendemos Binah en nosotros mismos. Aunque la Luz da porque esa es su naturaleza, la Luz también nos ha hecho capaces de desear, de aspirar por nuestra iluminación y crecimiento.
Está en tus posibilidades despertar y permitir que la Luz te habite.
Prana Raquel Pascual - Psicoterapeuta Gestalt
Imagen https://sefarad-asturias.org/wp/parashat-shemini-el-tabernaculo-y-su-polemica/