Sembrar

Sexto Día de la Séptima Semana: Yesod de Maljut

"Hoy es cuarenta y ocho días, que son seis semanas y seis días del Omer"

Vinculación en Nobleza

Les comparto una reflexión de chabad.org (itálicas)

Pensar tiene un profundo efecto. Así mismo no pensar.

Una mente obsesionada con las parodias de ayer, los dolores y molestias de hoy, y las nubes oscuras de mañana, crean problemas donde no existen.

Transforma los sueños en realidades, los montículos en monstruosidades, las criaturas inocentes en serpientes venenosas. Más aún cuando esas palabras pasan los labios al mundo tangible que todos compartimos.

Es por eso que simplemente darle la espalda a esos pensamientos es una forma tan poderosa de curación para cada tipo de enfermedad. Distraiga su mente a buenos pensamientos, pensamientos productivos, pensamientos de confianza en Aquel que lo hizo, y especialmente pensamientos de Torá.

De la sabiduría del Rebe de Lubavitch, de la memoria justa; palabras y condensación por el rabino Tzvi Freeman

Lo que hoy reflexiono es: Hoy que es un día de unir, me pregunto cómo es que unimos pensamiento y manifestación---¿Lo haces con confianza o con preocupación?

¿Cuando pones la semilla en la tierra confías o desconfías de su potencia?

¿Pones demasiado de tu ego en los proyectos que siembras o los dejas desenvolverse a su aire y vitalidad propias?

¿Eres un creador preocupado o confiado?

Prana Raquel Pascual

Coach de Vida y Carrera | Psicoterapeuta

Basado en chabad.org (itálicas)

Imagen https://www.diariamenteali.com/articulo/como_cultivar_culantro_en_casa_

Un rey justo

Quinto Día de la Séptima Semana: Hod de Maljut

"Hoy es cuarenta y siete días, que son seis semanas y cinco días del Omer."

Un tema que desde hace muchos años me ha llamado poderosamente la atención, es el del ejercicio de la autoridad y el liderazgo. cómo es que los humanos y otros seres tienen que hacer escalafones de mando y de toma de decisiones si quieren sobrevivir con éxito en entornos llenos de retos.

No todo mundo puede ser la cabeza, ni todo mundo puede ser quien dé las indicaciones. Ese es rol de enorme responsabilidad, y contrariamente a lo que tenemos como imagen de algunos modelos de mando que vemos en nuestros países, empresas y familias,  la idea no es tener soberbia al respecto, sino que, en el sentido más puro, son lo verdaderos siervos del pueblo, que están para asegurar el orden, la armonía y las decisiones que beneficien al bien común.

El liderazgo es una responsabilidad no una superioridad.

El liderazgo para ser realmente efectivo, no puede partir de ese sentimiento lleno de ego de "yo soy tu jefe y tú te sometes a mis deseos". Tampoco es un dejar sin orden por temor a ser impopular porque eso es faltar a sus responsabilidades.  

En realidad, se está más arriba, para tener una visión más amplia, no porque se pueda pisar la autoestima de nadie más, ni solo por el placer de ser llamado el jefe con los privilegios y sin las obligaciones, eso es un ejercicio perverso del poder.

Un verdadero líder en humildad sabe que su posición está al servicio del proceso de la comunidad.

Un líder humilde es digno, no altanero. Un seguidor humilde no es un conspirador, sino un colaborador digno. Sea cual sea la posición en que te corresponde estar, lo que manda es el bien común de todos, y lo que el proceso requiere para funcionar. Se necesita de gran valor y dignidad en ambos casos.

¿Juegas tu rol con dignidad y humildad?

La humildad en el liderazgo podrá generar a "un rey justo".

Prana Raquel Pascual

Psicoterapeuta Gestalt & Coach

Omer: basado en Prana Pascual 2019

Imagen El rey Salomón Rey Salomón, por Pedro Berruguete.