Martes, 3 de noviembre de 2015
El fin de una relación, una enfermedad o cualquier tipo de pérdida puede ser el catalizador del cambio y del desarrollo de claridad de propósito.
A menudo este tipo de dificultades es la que nos lleva a un estado en el que realmente comenzamos a pensar en nuestra vida y a hacer preguntas como:
¿Qué he logrado?
¿Qué he cambiado?
¿Qué he hecho para aumentar mi espiritualidad en este mundo?
¿Qué he hecho para desarrollar esa parte de mí que es más elevada que los animales?
En esos momentos de preguntas internas tenemos la posibilidad de pasar por cambios profundos. A través de la presión y el dolor despertamos para estar más presentes, más conscientes de lo que nos rodea, hacer algo por nuestra familia y amigos, compartir con nuestra comunidad. Nos damos cuenta, con una nueva claridad, que necesitamos hacer la diferencia en este mundo y no tenemos una eternidad para lograrlo.
El día de hoy piensa en tu vida. Cualquier desafío por el que estés pasando puede ser un aviso que te dice: “¡Despierta! Recuerda quién eres y tu propósito para estar aquí”.
Karen Berg
________________
Una de las transformaciones más fuertes que veo, es la que nos coloca como responsables no como víctimas.
Muchas veces nos preguntamos cómo es posible que "a mi" me estén pasando estas cosas, y bueno, la pregunta es ¿Porqué no a ti si no estás teniendo otra manera de enfrentarlas?
Observa a tu alrededor. Hay cosas que a ti te enganchan que a otros no...si la ciencia se basa en la repetición: bajo las mismas condiciones el efecto se repite de la misma manera todas y cada una de las veces, pero los humanos, no caemos en ese rubro, no somos ciencia exacta, ni modo (¡Y qué bueno!). Nosotros somos algo más parecido al arte ;-) no es exacto, es más de percepción, más de concepto, más de belleza que de exactitud.
A nosotros nos pasa un evento en el que cien personas lo presencian y habrá cien percepciones distintas del evento. Ahí puedes ver claves de que a ti te pasa la vida de una manera que puede ser más dramática por tu interpretación que por lo cierto que está pasando. Algunos transcurren con gracia cosas que tu no y viceversa, pero eso nos muestra el potencial que hay de vivir y experimentar. La gama de lo humano es extraordinaria y nosotros a veces elegimos siempre el mismo sabor de helado y el mismo tono de medias jajaj por no decir la misma gastada emoción y la misma manera de enfocar la vida ¿Por qué?
Si tu llevas mucho rato experimentando las cosas siempre con la misma perspectiva, ¿Qué tal que hoy encuentras cómo cambiar tu punto de visión?
A veces es simplemente una forma de nombrar las cosas para cambiar tu vivencia de ellas, si en lugar de "problema" encuentras que "ganar experiencia" puede hacer mucho más interesante la misma situación, que "aprender" es más rico que "sufrir", que "apreciar lo diferente" es más poderoso que tolerar ...la vida puede tomar un matiz en el que te vuelvas un turista no un arriero.
¿"Vas" o "te llevan" en esta vida? =)
Prana Raquel Pascual
Psicoterapeuta Gestalt
ESTE BLOG ES PARA COMPARTIRSE. Si lo que lees aquí lo encuentras útil, sabio o hermoso...no te lo quedes para ti nada más. Compártelo con tus seres queridos.
miércoles, 4 de noviembre de 2015
martes, 3 de noviembre de 2015
Martes 3 de noviembre de 2015. El crecimiento
Martes 3 de noviembre de 2015. El crecimiento
El crecimiento ocurre cuando nos presionamos a continuar en los momentos difíciles.
Karen Berg
__________________
Esta frase se me hace totalmente propicia en el marco de un trabajo espiritual deliberado, no en la elección obsesiva de un tema solo porque no se puede dejar y que va más allá del libre albedrío que involucra: "dejar ir" o "seguir eligiendo".
¡Ojo! Quizás es por mi formación de psicoterapeuta que me cuestiono mucho el tiempo de "soltar" versus el tiempo de "perseverar".
Algunos de los puntos que se me hacen interesantes de reflexionar para distinguir, es que cuando el momento difícil incluye intentar conseguir que alguien haga algo que a nosotros nos gustaría que pasara pero no lo hace porque no quiere, no está en su naturaleza, no le interesa, no está en su libre albedrío etc etc etc...no parece que seamos nosotros haciendo el esfuerzo "espiritual" de crecer, sino queriendo forzar al sistema a funcionar para nuestro deseo totalmente egoísta...algo que puede parecer como una obsesión.
La pregunta clave es ¿En quien está el trabajo de cambio y transformación? ¿En ti...o en un otro, ya sea una persona, una organización, un gobierno, un país etc.? OJO.
Si te oyes decir que necesitas que tu pareja tu hijo tu jefe hagan algo distinto...el trabajo lo estás poniendo fuera de ti. No parece ser trabajo espiritual e interno, sino una exigencia al exterior.
Por otra parte, a veces las circunstancias parecen ser las que nos demandan a nosotros algo: Si estás en un trabajo o en alguna circunstancia en la que las cosas parecen no sonreír, parecen un tanto cuanto adversas y a ti lo que se te antoja fuertemente es escapar a como dé lugar...detente, reflexiona: ¿Porqué quieres huir con tanta desesperación?
Temo que restricción y desesperación aunque terminen igual y hasta rimen, no tienen una comunión entre sí. Si estás decidiendo por desesperación por angustia, por cansancio pero la situación parece tenerte un poco atrapado y aún parece requerir algo de ti en términos de que crezcas, soluciones o decidas, es probable que valga la pena continuar y no solo eso, sino encontrar la manera de hacerlo con la mayor serenidad posible.
Sin embargo, y esto es lo delicado del trabajo espiritual, es que hay situaciones en las que somos nosotros los que estamos aferrados a algo que parece terminado, algo ya sin futuro y que nosotros somos quienes estamos literalmente colgados, invirtiendo le energía buena a algo que sabemos inútil y que ya no está bajo nuestro control porque ya es "que fulano se enamore de mi" ( eso es algo a lo que nadie obliga a nadie), ni el genio de Aladino y la lámpara lo acepta, si recuerdas sus reglas son: "No puede matar a nadie, no puede hacer que nadie se enamore de ti y no puede levantar a los muertos", porque nada de eso está dentro del marco de lo personal de quien lo solicita.
Aquí igual. Me da mucho susto cuando alguien que quiere a fuerzas preservar algo que le está haciendo tanto daño, que piensa que debe continuar y esforzarse y seguir pedaleando...cuando muy probablemente el requisito verdadero sea desarrollar auto estima suficiente y certeza de que esto no da para más y soltar, punto.
Si lo que tiene que suceder no cae en el ámbito de ti mismo transformándote, y en cambio, cae en el de querer que suceda algo en el entorno para que tu quedes igual y cómodo, y sea otro quien cambie y haga...tal vez no estás entendiendo el trabajo personal / espiritual de la manera más adecuada.
Ojo: El trabajo espiritual es lo más personal que existe: No puedes exigirle a nadie que haga nada, así que si tu "continuar" incluye que alguien sea más lindo, te trate mejor, te quiera, te cumpla, te dé...quizás no estás realmente haciendo trabajo espiritual y eres tú quien debe voltear a ver que hacer con su situación.
Lamento si sientes en este momento que se te rompe el corazón de saber que los demás no están obligados a hacer nada para complacerte, pero es cierto. Te va a romper más el corazón y a hacerte perder más tu tiempo vital si crees que es el entorno quien tiene que cambiar para evitarte la molestia de crecer.
Feliz día
Prana Raquel Pascual
Psicoterapeuta Gestalt
El crecimiento ocurre cuando nos presionamos a continuar en los momentos difíciles.
Karen Berg
__________________
Esta frase se me hace totalmente propicia en el marco de un trabajo espiritual deliberado, no en la elección obsesiva de un tema solo porque no se puede dejar y que va más allá del libre albedrío que involucra: "dejar ir" o "seguir eligiendo".
¡Ojo! Quizás es por mi formación de psicoterapeuta que me cuestiono mucho el tiempo de "soltar" versus el tiempo de "perseverar".
Algunos de los puntos que se me hacen interesantes de reflexionar para distinguir, es que cuando el momento difícil incluye intentar conseguir que alguien haga algo que a nosotros nos gustaría que pasara pero no lo hace porque no quiere, no está en su naturaleza, no le interesa, no está en su libre albedrío etc etc etc...no parece que seamos nosotros haciendo el esfuerzo "espiritual" de crecer, sino queriendo forzar al sistema a funcionar para nuestro deseo totalmente egoísta...algo que puede parecer como una obsesión.
La pregunta clave es ¿En quien está el trabajo de cambio y transformación? ¿En ti...o en un otro, ya sea una persona, una organización, un gobierno, un país etc.? OJO.
Si te oyes decir que necesitas que tu pareja tu hijo tu jefe hagan algo distinto...el trabajo lo estás poniendo fuera de ti. No parece ser trabajo espiritual e interno, sino una exigencia al exterior.
Por otra parte, a veces las circunstancias parecen ser las que nos demandan a nosotros algo: Si estás en un trabajo o en alguna circunstancia en la que las cosas parecen no sonreír, parecen un tanto cuanto adversas y a ti lo que se te antoja fuertemente es escapar a como dé lugar...detente, reflexiona: ¿Porqué quieres huir con tanta desesperación?
Temo que restricción y desesperación aunque terminen igual y hasta rimen, no tienen una comunión entre sí. Si estás decidiendo por desesperación por angustia, por cansancio pero la situación parece tenerte un poco atrapado y aún parece requerir algo de ti en términos de que crezcas, soluciones o decidas, es probable que valga la pena continuar y no solo eso, sino encontrar la manera de hacerlo con la mayor serenidad posible.
Sin embargo, y esto es lo delicado del trabajo espiritual, es que hay situaciones en las que somos nosotros los que estamos aferrados a algo que parece terminado, algo ya sin futuro y que nosotros somos quienes estamos literalmente colgados, invirtiendo le energía buena a algo que sabemos inútil y que ya no está bajo nuestro control porque ya es "que fulano se enamore de mi" ( eso es algo a lo que nadie obliga a nadie), ni el genio de Aladino y la lámpara lo acepta, si recuerdas sus reglas son: "No puede matar a nadie, no puede hacer que nadie se enamore de ti y no puede levantar a los muertos", porque nada de eso está dentro del marco de lo personal de quien lo solicita.
Aquí igual. Me da mucho susto cuando alguien que quiere a fuerzas preservar algo que le está haciendo tanto daño, que piensa que debe continuar y esforzarse y seguir pedaleando...cuando muy probablemente el requisito verdadero sea desarrollar auto estima suficiente y certeza de que esto no da para más y soltar, punto.
Si lo que tiene que suceder no cae en el ámbito de ti mismo transformándote, y en cambio, cae en el de querer que suceda algo en el entorno para que tu quedes igual y cómodo, y sea otro quien cambie y haga...tal vez no estás entendiendo el trabajo personal / espiritual de la manera más adecuada.
Ojo: El trabajo espiritual es lo más personal que existe: No puedes exigirle a nadie que haga nada, así que si tu "continuar" incluye que alguien sea más lindo, te trate mejor, te quiera, te cumpla, te dé...quizás no estás realmente haciendo trabajo espiritual y eres tú quien debe voltear a ver que hacer con su situación.
Lamento si sientes en este momento que se te rompe el corazón de saber que los demás no están obligados a hacer nada para complacerte, pero es cierto. Te va a romper más el corazón y a hacerte perder más tu tiempo vital si crees que es el entorno quien tiene que cambiar para evitarte la molestia de crecer.
Feliz día
Prana Raquel Pascual
Psicoterapeuta Gestalt
Suscribirse a:
Entradas (Atom)