Hoy
es el séptimo día de la segunda semana, catorce días que son dos semanas del
Omer.
Maljut
de Guevurah
Nobleza,
Soberanía, Liderazgo en Disciplina
A
veces, podemos experimentar el ser disciplinados como ser sometidos y que eso
atente contra nuestra soberanía.
El
mejor equilibrio que podemos conseguir en este caso es disciplinar con dignidad:
la persona simplemente no sabe, o la persona no tiene contexto, pero no es un
tonto por ello.
Se
disciplina para que después las personas puedan volar por sí mismas, no para
que dependan eternamente de quien los formó.
¿Puedes
fomentar esa auto-estima en la persona a la que estás disciplinando?
Por
otro lado...si estás en el lado opuesto de la ecuación... ¿Te tratas con
dignidad cuando no sabes y necesitas aprender...o te quedas con las dudas para
que no piensen que eres un tonto?
¿Te
parece que preguntar es atentar contra tu propia auto estima?
¿Tu
inseguridad te impide pedir ayuda en algo que no tienes posibilidades de
resolver por ti mismo, no por tonto sino porque no tienes manera de contar con
todos los recursos sin apoyo de alguien más?
Obsérvate:
si vives en la creencia de que te devalúa preguntar o pedir estructura, quizás
tu solo estás aniquilando la posibilidad de ser ayudado.
De
cualquiera de los dos extremos, nadie en este mundo es independiente de otros,
algunos se vuelven dependientes, pero existe el lugar balanceado de
inter-depender
¿Qué
acciones puedes tomar hoy para construir esta faceta?
Prana Raquel Pascual
Coach de Vida y Carrera | Psicoterapeuta Gestalt
Les comparto
De la sabiduría del Rebe de Lubavitch de chabad.org el siguiente texto:
Nada puede detenerte, ni tu
infancia, ni la historia de tu vida, ni siquiera el último momento anterior. En
un momento puedes abandonar tu pasado. Y una vez abandonado, puedes
redefinirlo.
Si el pasado fue un anillo de
futilidad, deja que se convierta en una rueda de anhelo que te impulse hacia
adelante.
Si el pasado fue una pared de ladrillos, deja que se convierta en una
presa para liberar tu poder.
El primer paso del cambio es
tan poderoso, que los límites del tiempo se hacen a un lado. En un momento
agridulce, el aguijón del pasado se disuelve y se recupera su miel.
De la sabiduría del Rebe de
Lubavitch, de la memoria justa; palabras y condensación por el rabino Tzvi
Freeman.