JUEVES 10 DE JULIO DE 2008. Monedas de oro. Espiritualmente hablando, eso es exactamente lo que recibes cada vez que compartes. Esto no lo digo yo, son las palabras de Rav Isaac Luria, el gran Kabbalista del siglo XVI. Él dice que si solo pudiésemos ver la riqueza que es revelada cada vez que damos algo de nosotros mismos, correríamos todo el día tratando de buscar situaciones de compartir.¿Cuándo fue la última vez que realmente compartiste? Hoy, cuando esa pequeña voz gime dentro de tu cabeza, "¿qué hay allí para mí?, responde: ¡ORO! Comparte algo –dinero, tiempo, amor– y reconoce que cada vez que vas en contra de tu naturaleza y eres sincero cuando das, recibirás el apoyo espiritual para que todos tus sueños se manifiesten.
Yehuda Berg
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foto: members.tripod.com/~numisecu/monedas.jpg
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En octubre de este año cumplo dos años de ser una estudiante de Kabbalah.
Desde que llegué al Centro supe que había llegado al camino que había estado buscando sin saber aún su nombre.
Y aún así, aun sabiendo que esta sabiduría era la que mi alma necesitaba, en la séptima clase aproximadamente nos hablaron de voluntariado.
Como estamos acostumbrados a que funcione este mundo la verdad es que aunque si me anoté en la lista, confieso que no lo hice con tanto entusiasmo ya que no comprendía de fondo lo que realmente estaba sucediendo o la verdadera oferta de valor implícita.
El Centro es un lugar en que se te imparte la sabiduría, pero además te brinda un espacio para que pongas en práctica lo que estás aprendiendo: Compartir.
Es bastante común que viniendo de un medio del mundo material en donde si yo trabajo tengo que recibir "plata" para que suceda, se llegan a dar malentendidos de porque estás siendo invitado a ayudar en el Centro, pero casi nunca te pasa por la cabeza el verdadero motivo.
Voluntariar es en realidad una manera de volverte afin a la Luz, volverte afin al Centro, crear un sentido de pertenencia, salirte de tu cómodo egoismo y de mover los mundos superiores.
No olvidemos que Kabbalah nos habla de un 1% que es el mundo material y un 99% que es el mundo de la consciencia. Cuando compartes incondicionalmente, mueves esos mundos. Tu compartes y entras en afinidad con el universo que su naturaleza es DAR DAR DAR.
Hoy día soy voluntaria en varios proyectos, a veces puedo llegar a pensar que me da flojera ir, que podría estar mejor tomándome el cafecito y comiendo pastel en esa tarde libre...pero la verdad es que tardes como ayer que tuvimos reunión de mentores y después una clase espectacular, rodeada de muchos nuevos amigos que estamos en este mismo camino, en una comunidad consciente, que está buscando hacer de su vida una gran oportunidad para compartir, transformarse en mejores seres humanos, hacer de este mundo lo que está destinado a ser -un lugar donde la Luz viva"...veo claramente el ORO de estar con todas estas valiosas personas y me doy cuenta que no hay mejor lugar donde estar...=) La Luz.
Cariño!!
Prana Pascual
