jueves, 13 de junio de 2024

Mantener la salud espiritual

Hemos hecho el viaje express de crecimiento del Omer y suspendimos por ese periodo el foco en el viaje circular anual que representa el circuito de porciones de la Torah que va más pausado y que nos dejando ver detalladamente los trastabilles con los que nos podemos topar.

Acabamos de hacer Shavuot, la conclusión de un proceso de sanación espiritual y ahora lo que no queremos es volver a contraer una enfermedad.

Unamos los puntos:

La última porción de la que hablamos fue Metzorá que si hacemos memoria simple, recordaremos que nos cuenta de la mala palabra y sus consecuencias, la lepra, una enfermedad que se nota a simple vista pero con una serie de consecuencias sistémicas en el organismo, es decir, afecta piel, pero también daño neurológico y debilidad muscular que va empeorando con el tiempo.

"El Zohar dice que la palabra metzora o tza’arat, es a menudo traducido como "lepra", y cuando se traduce en arameo se llama segiru , que significa "cerrado" Esto nos indica que las porciones de Tazria / Metzora no son acerca de la dolencia física, sino más bien la preocupación por una enfermedad espiritual que todos sufrimos en mayor o menor grado - está cerrado para la Luz".

Hablar mal de otros, de uno mismo o de la situación crea una capa, una klipá que dificulta poder volver a ver a la persona u objeto en cuestión con pureza, crea un sesgo y lo perpetua.

Los humanos somos especialmente afectables de lo que escuchamos, nos cuesta inmenso trabajo filtrar lo que es verdad de lo que no, lo que es bien intencionado de lo que no; nos confundimos y aunque queremos no hacer caso o no dejarnos influenciar, algo de la maledicencia queda impregnada, tanto así que es un mecanismos muy utilizado por los políticos o comunicadores que tienen alguna agenda en la que desprestigiar o ensalzar a alguien les es útil para sus fines personales: 

"Calumnia, que algo queda" o la otra frase dicha por un ser muy destructor, Joseph Goebbels: "Una mentira dicha mil veces se convierte en una gran verdad".

Antes de reincorporarnos nuevamente al circuito de porciones quisiera invitarte a que tengas esto presente: Estuvimos en un programa de rehabilitación para sanar -que fue el Omer-. Te insto a que mantengas tu salud espiritual evitando la práctica de la mala palabra, es decir, cuida la intención con la que te diriges a otros, lo que quieres crear con tus decires, cuida lo que escuchas y a quien le concedes derecho a resonar en tus convicciones. Procura no emitir juicios ni calificativos de alguien más. Pasa tu hablar por el filtro de las tres rejas: ¿Estás seguro de que es absolutamente cierto? ¿Es bondadoso? ¿Es absolutamente necesario decirlo?

Mantengamos la pureza que nos dio el proceso del Omer, no volvamos a permitir desviarnos de la Luz.

Con cariño,

Prana Raquel Pascual - Psicoterapeuta Gestalt

Imagen https://x.com/emma10gtz/status/1064364133728931840



No hay comentarios.: