miércoles, 26 de agosto de 2020

Preparando la batalla

 

Estamos recorriendo la porción llamada Ki Tetzé. 

Las porciones que anteceden las fechas de Rosh Hashaná tiene que ver con nuestra preparación para el año nuevo, que no es por si mismo un cambio meramente calendario, sino el periodo en que tenemos oportunidad de recrear nuestra vasija, nuestra alma, para el siguiente año vital. 

Se dice que en Rosh Hashaná se determinan --basada en causas y efectos-- la calidad de nuestras vidas para el siguiente año por vivir.

Pues bien, en la porción de Ki Tetzé la Biblia habla de "cuando salgas a la guerra".

Reflexionemos: 

Si le pregunto a un comandante que ¿Cuánto tarda en preparar una guerra? me preguntará: ¿A qué guerra te refieres? ¿Es en terreno seco, en el aire o en el agua? ¿Contra qué ejercito vamos a estar peleando? ¿Cuántos soldados tiene el enemigo? ¿Dónde tienen bases militares? ¿Quién los apoya? ¿Qué servicio de inteligencia tiene? ¿Desde cuándo somos enemigos? ¿Con que armamento cuentan? Me hará muchas preguntas, porque una guerra no se improvisa, hay que preparase mucho antes de tan siquiera pensar en salir a la guerra.

Hay que recolectar información y después cuando ya la tengo, hay que reunir a mis soldados y decirles el porqué de la batalla, quien es el enemigo, dejarles saber por qué se está luchando. Si los soldados no saben el propósito por el que luchan no pueden hacerlo como debieran.

Acabo de leer justamente un libro que habla de la guerra del Peloponeso y narra que los atenienses alineaban a sus tropas de manera en que familiares y vecinos quedaran juntos en el mismo batallón ¿Por qué? Para que les importara la persona con la que estaban peleando y no lo abandonaran, que no rompieran la formación, ni les fuera indiferente la suerte del de junto. Otros peleaban por ganar su libertad después de haber sido esclavizados. Lo peor era quien iba sin motivo, eran los que podían ser traidores o desertores con mayor facilidad.

Así nosotros, tenemos que saber contra quien, con quien y para qué batallamos, pero esta es la guerra con nuestro ego.

¿Contra quien peleas? 

Hace unos días hablaba con alguien que está pasando un muy mal momento por decisiones pasadas y efectos que le ha traído su comportamiento. Detectamos que las peores reacciones que recolectó este año fueron por cierta arrogancia en su proceder y que el intenso dolor que tenía era en su orgullo mancillado. Ese es un nombre para su ego; arrogancia, y ese es un enemigo con nombre propio a vencer con consciencia... ¿Por qué elige a la arrogancia como soldado en su batalla? ¿Qué parte de su verdadera personalidad está siendo defendida por esa arrogancia?

¿Tu contra qué y contra quien has estado batallando este y otros años?¿Contra quien sales a la guerra?

Prana Raquel Pascual

Coach de Vida y Carrera | Psicoterapeuta

Imagen https://elnietodenicomaco.wordpress.com/2019/03/07/la-guerra-del-peloponeso-alcibiades-y-el-directivo-egolatra/

4 comentarios:

W Garcia dijo...

¿Qué defiende la arrogancia? Por lógica, aquello en lo que se sustenta. La arrogancia del rey defiende la inviolabilidad de la investidura; la arrogancia del soldado, la conveniencia de la violencia; y, el ego, la autoestima, según pienso. Pero creo que la arrogancia pierde de vista la verdad de la persona a la que defiende, tergiversa la personalidad en la que se funda. Me dio gusto volver a leerte, Prana. Un gusto a cierta nostalgia. Felicidades por tu perseverancia.

Prana Raquel Pascual dijo...

Un corazón adolorido por un sentimiento de abandono en su infancia en este caso. Mil gracias por escribir, espero que sigamos coincidiendo por aquí! Un abrazo
Prana Raquel

W Garcia dijo...

El dolor sólo engendra dolor. El arrogante se lastima a sí mismo en la persona de otros. Pero la infancia tiene la maravillosa cualidad de ser adaptable, incluso al dolor, y así construye su propia resiliencia.

¿Me pregunto si, finalmente, habrá permitido a su niño interno ayudar a sanar aquello? ¿O persiste en el resentimiento, agravando la herida y manteniendo como rehén a su propia infancia?

Feliz domingo

Prana Raquel Pascual dijo...

Está atendiéndolo en su proceso de psicoterapia, lo cual me parece muy honorable :-) lleva pocas sesiones pero está trabajando con valentía y estoy confiada de que lo logrará.