La fabula de la gallina y el murciélago

El 17 de Tammuz (Cáncer) al 9 de Av (Leo)  son 21 días o --las tres semanas, conocidas como "Negativas", entendidas como periodo de mucha revelación de Luz.

Cuando el mundo fue creado, toda la luz del 99% fue escondida, a eso se le llama la “Or Aganuz”, "la Luz oculta", solo reservada para los Tzdikim (los Justos).

Recordemos que la sabiduría de la Kabbalah nos habla de el 99% como Mundos Espirituales y 1% como "el mundo físico" de Maljut, que es en el que llevamos a cabo nuestra vida humana. Es importante tener este concepto bien fresco, ya que si no este comentario puede ser confuso. Maljut es la manifestación del mundo material en el que sentimos la limitación. Mundos espirituales son un mundo de potencial, no es material, pero no por ello no existe. Los descubrimientos en el mundo de la ciencia por ejemplo, son cosas que se "revelan", y que no por "no estar descubiertas", no existían previo a la conciencia humana...En tu personalidad, y en todo lo que sucede en este mundo, ese tipo de ocultamiento y revelación también es aplicable.

Entonces bien, en este periodo se revela la Or Aganuz en la que tenemos posibilidad de conectar con la mencionada "Luz oculta", la otra fecha en el año que podemos conectar es Januká.

El Rav explica, que si bien hay una revelación de mucha Luz, si hay poca vasija (es decir, poca capacidad de gestionar la energía), dicha vasija se revienta. Si no hay una resistencia (restricción), puede haber un corto circuito.

Si eres un nuevo lector o antiguo, pero te ayuda tener un ejemplo, te lo explicaré de la siguiente manera: una persona que recibe mucha fama y fortuna sin un proceso de madurez, tiende a reventar, es decir, caer en excesos, "perderse", volverse casi loco con tanta "luz" que recibe sin capacidad de gestionarla. A eso nos referimos con "no tener aún vasija". Hay muchos ejemplos que seguramente podremos traer a nuestra mente a partir de este indicio.

Pues bien, continuemos:

Rav Ashlag comenta en la Introducción a las 10 Emanaciones Luminosas, sobre una fábula en la que hay una gallina y un murciélago y está a punto de amanecer; el murciélago le dice a la gallina: “estoy feliz de que va a amanecer” y la gallina le responde... yo entiendo por qué a mi me da gusto (por ser un ser diurno) pero ¿¿Por qué al murciélago debiera alegrarle si la luz lo enceguece??

Lo que pasa en estos 21 días una revelación tan grande, que lo que nos sucede es como al murciélago, que tanta Luz nos puede llegar a "cegar".  

Las personas que se han separado de su deseo de recibir para sí mismos, experimentan pura luz, las personas como nosotros que todavía estamos conectados a las limitaciones del cuerpo, esta Luz nos puede llegar a lastimar, por qué no somos afines, mucha Luz y poca vasija espiritual es un corto circuito.

¿Cómo protegernos? ¿Cómo programarnos para recibirla? Mucha restricción.  Estar extra cuidadosos con cualquier cosa que sea un exceso, tener cuidado con las manifestaciones de "la falla" de la que hablábamos ayer, (la que podemos descubrir esta semana...) ¿Eres perezoso? Ponte las pilas. ¿Eres iracundo o rabioso? Ponte en modo sereno, ¿Eres de poca voluntad? Haz un extra esfuerzo por manifestar tu motor personal. 

Hay muchas maneras de actuar la resistencia que en estos días es especialmente necesaria.

Y en general este año, no sé como la estés pasando Comunidad, pero tenemos muchas influencias astrológicas un poco intensas que se pueden estar sintiendo como "rudas" o como "implacables". Eventos que parecen simplemente imparables, pero bueno justo son las que nos están poniendo pruebas para crecer o ser retados para "dar más de nosotros mismos" y transformar.

Mucho trabajo de conciencia. No podemos dormirnos en nuestros laureles y menos en estos días.

Sin miedo y con conciencia Comunidad

Shabbat Shalom hoy por la noche

Prana Raquel Pascual

Psicoterapeuta Gestalt & Coach 

Basado en clase de Kabbalah 2008 El Centro de Kabbalah Internacional

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