Viernes 14 marzo 2014
Cuando alguien es antipático, rara vez nos
sirve responder de manera similar. Una de las formas más positivas para
influir en el cambio de otros es siendo un ejemplo de lo que más te
gustaría ver en ellos.
No esperes a que alguien sea agradable contigo. Muéstrale cómo serlo.
No esperes a que alguien sea agradable contigo. Muéstrale cómo serlo.
Yehuda Berg
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Sabemos que el Libro de Levítico habla prácticamente de sacrificios. En Tzav en uno d elos primeos párrafos, la primera ofrenda es discutida.
"Los sacrificios son parte del proceso de transformación de los kohenim, los sacerdotes.
Por el gran poder que ellos tenían, debían que alcanzar y mantener un estándar espiritual más alto que el resto de las personas. Aún Aaron que era muy elevado, aún tenía aspectos de sí mismo que necesitaban ser limpiados.
Cuando se llega a niveles espirituales elevados, nuestra tarea es la auto-purificación, misma que se vuelve más rigurosa. Mientras estamos en niveles bajos, podemos hacer acciones poco luminosas sin grandes efectos aparentes, más sin embargo, mientas vamos subiendo, seguir actuando de esa manera se empieza a volver venenoso, haciendonos caer a niveles más bajos espiritualmente. "
Este texto no es mio, este texto lo tomo directamente de la Biblia explicada desde el punto de vista kabbalistico y habla de la responsabilidad personal que tenemos cada uno de nosotros de elevarnos y hacer las acciones pertinentes para subir y mantenernos en un nivel espiritual qué tenga un verdadero contenido, qué tenga algo qué decir.
Al referirme a "qué tenga algo que decir" me refiero a que nadie puede ser predicador de lo que no practica puesto que se pierde por completo el valor de las palabras cuando el contenido no tiene esa misma sustancia. Un padre no le puede decir a un hijo que actue de tal o cual manera si el mismo no está dispuesto a hacer esas mismas acciones, esos mismos sacrificios.
Aquí vemos que Aaron hacía el trabajo al igual que sus hijos, quienes también estaban haciendo el trabajo. No pedía distinto de lo que estaba dispuesto a hacer
En este caso para todos nosotros se duplica el mensaje, no somos quienes opinar en la vida de nadie, somos necesariamente responsables de actuar sobre de la nuestra y que nuestras acciones hablen fuerte y claro. Esa es la única manera verdadera hablar y educar.
A Ariel Grunwald le he escuchado con frecuencia esa anécdota de Mahatma Gandhi y la mujer que viaja por días para llegar a verle y llevar a su hijo con ella. El niño había sido diagnósticado con diabetes y por supuesto debía dejar de ingerir azúcar. La solicitud de la madre a Mahatma Gandhi fue "Mi hijo no debe comer azúcar, por favor explíquele porqué no puede hacerlo, que no debe".
Por supuesto ella estaba confiada en la altura y el respeto de tan inmenso hombre y sin embargo el le dijo..."Traeme a tu hijo dentro de tres meses"...la mujer después de un viaje tan esforzado, con tanta dificultad por supuesto se sintió azorada de ello y no necesariamente feliz...pero bueno, lo hizo y espero tres meses y volvió a llevar a cabo el inmenso recorrido para ver al prócer. Al llegar, lo que Mahatma Gandhi le dijo al pequeño fue: "No comas azúcar" o.O
Evidentemente (no sé que expectativas tendría la madre jaja) la mujer mostró su molestia al ver que lo único que le decía era "No comas azúcar"...eso hasta ella podía haberselo dicho habiendose ahorrado kilómetros esfuerzo y dinero...
Y se lo expresó a Gandhi..."¿Todo este viaje para esto? ¿Para decirle "No comas azúcar"? A lo que Mahatma Gandhi le dijo...Cuando viniste aquí por primera vez yo mismo tenía un gran gusto por comer azúcar, no tenía poder para decirle algo así a tu hijo, algo que ni yo mismo hago...te pedí que volvieras dentro de tres meses porque en ese tiempo yo mismo dejé de comerla, ahora tengo la fuerza y el contenido necesario para decirselo ya que yo mismo dejé de tomarla...ahora puedo decirlo y apoyarme en mis acciones".
Así que bien...es factible que tengamos en nuestra vida alguna situación así, es factible que tengamos muchas opiniones acerca de lo que hacen los demás. El mundo realmente empieza en cada uno de nosotros. No hay piedra que podamos lanzar si nosotros realmente no tenemos las bases reales adquiridas por nuestro propio mérito para expresar el deseo de que alguien más sea distinto.
¿Donde andas tú? Tú tú, no tus papás, tus hijos, no donde están tus amigos o enemigos...¿TÚ donde estás situado personalmente? ¿Qué peso verdadero tienes que soporte tu valor personal y el poder de tu palabra?
=)
Para eso trabajamos diario...y si no lo estamos haciendo, para recordarlo.
Feliz viernes...y por la noche Shabbat Shalom
Prana Raquel Pascual
Contenido basado en el Libro de Levítico Biblia Kabbalística tomo 3 editada por Centro de Kabbalah Internacional.
Imagen Azúcar.
http://www.mizan.com/news_det/selain-pemanis-inilah-9-manfaat-mengejutkan-gula.html
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