Chesed de Chesed, el primer día del Omer.
Comenzamos anoche con la oportunidad del periodo llamado La cuenta del Omer. Recordemos un poco de que se trata este periodo.
Afirmación A: los israelitas en Egipto estaban en el nivel 49 de
impureza, es decir, a un solo paso de distancia del fondo del nivel 50 de impureza espiritual.
Afirmación B: los israelitas estaban en el nivel 49 de Santidad
cuando ellos recibieron la Torá, a un solo paso de distancia del nivel superior de Santidad
Afirmación C: los 49 días del Sefirot Ha Omer o cuenta del Omer
nos ayudan a atravesar esos 49 niveles de manera que estemos listos
para aceptar la Torá al final del proceso. Cada día del Omer nosotros trabajamos para refinar rasgos de nuestro carácter y subir un nivel hasta que 49 días
después estamos listos para recibir la Torá.
Pensándolo bien, nos dice Rabi Mendel Adelman, si hay 49 niveles positivos y 49 negativos (50 sería lo máximo dentro del rango espiritual en el que estamos los humanos), estamos hablando que de 49 de negatividad a 49 de positividad son en realidad 98 escalones ¿Entonces que hacer? Nos quedaríamos cortos si solo subimos 49...
El lo que dice es que en cada día hay que hacer dos movimientos, uno de identificar lo negativo y corregirlo ¿Cómo? Revisando el rasgo de carácter correspondiente y canalizarlo adecuadamente. Un rasgo emocional por ejemplo, la ira, no es malo por sí mismo sino que no lo utilizamos adecuadamente.
Revisemos: quizás la ira utilizada indiscriminadamente lastima, limita a las personas a poder acercarse, pero si en cambio, canalizáramos bien el enojarnos ante las injusticias y ser capaces de tomar una posición contra el injusto, la ira no solo sería magnífica sino idónea. Es decir, identificas ese potencial de energía que es la emoción de la ira y posteriormente lo canalizas adecuadamente. Suena loable ¿No?
La primera semana estaremos corrigiendo Chesed, la séfira de la Misericordia, del Amor, la Benevolencia, la Bondad.
Hoy específicamente es Chesed de Chesed (se dice Jesed). Benevolencia en Benevolencia.
La benevolencia puede traducirse en lo negativo a permisividad, condescendencia, laxitud, sentimiento de superioridad o de inferioridad ante quienes amamos.
Amar sanamente es reconocer mi valor y el valor del otro, poder mirarnos a los ojos como "pares humanos", con el mismo valor, no te amo porque eres menos que yo, ni porque eres más. Te amo en nuestras diferencias, pero no me siento supeditado ni superior. Te Amo y Me Amo igualmente. Te quiero, te reconozco tanto como me amo a mi, como me reconozco a mi mismo. Somos distintos pero valemos en equivalencia 1=1 . Como quien en un grupo de música, todos hacen la melodía, cada quien su parte, pero el resultado surge de nuestra unión.
¿Qué ajustes puedes hacer en tus relaciones donde ames y te ames sin sentirte ni más ni menos?
Prana Raquel Pascual - Psicoterapeuta Gestalt - Coach.
Basado en las palabras de Rabi Mendel Adelman / chabad.org
Imagen: https://caminodemusica.com/musica-de-camara/cuarteto-de-cuerdas-cinco-ejemplos-de-cuarteto-de-cuerdas
