Rosh Hashaná significa la semilla del nuevo año. Nuestra conexión
con la comida que se sirve esta noche nos ofrece la oportunidad de
infundir esta semilla con Luz espiritual, a fin de tener un año lleno
de buena fortuna y bendiciones.
Habitualmente hay una cena deliciosa con la cual celebrar, pero también hay una cena de conexión que lleva ciertos elementos en particular que en sus nombres hebreos y su gematría (valor numérico), nos conecta con cierta energía en particular, misma que les comparto brevemente en esta publicación (fuente original El Centro de Kabbalah Internacional):
Rimón – _ רִמּוֹ - Granada
1. La granada contiene 613 semillas, el número exacto de preceptos prescritos en la Torá. Los kabbalistas enseñan que cada precepto es un canal específico para la Luz. Nuestra conexión con la granada activa nuestra fuerza para hacer el trabajo espiritual, especialmente en las áreas en las que tenemos dificultades y, al hacerlo, conectarnos con nuestro máximo potencial a lo largo del año entrante.
Rosh keves – רֹאשׂ כֶּבֶשׂ – Cabeza
de cordero/pescado
2. Cabeza de un cordero (frecuentemente se suple con cabeza de pescado), que representa la cabeza o lo más elevado de la atmósfera espiritual, la dimensión y Sefirá conocida como Kéter. Al realizar esta conexión, garantizamos que nuestro sustento espiritual durante Rosh Hashaná sea obtenido directamente de la fuente original de la Luz Divina. El Zóhar explica que “el pensamiento del hombre es el principio de todo”, así que al hacer esta conexión podemos realinear nuestros pensamientos con los pensamientos del Creador a lo largo del año entrante. Aquí tenemos la posibilidad de conectarnos con la orientación divina.
Tamar – תָּמָר – Dátil
3. En hebreo, la palabra tamar tiene la misma raíz que la palabra tam, que significa “terminado”. Uno de nuestros objetivos en Rosh Hashaná es asegurar que todos nuestros enemigos sean “terminados” y eliminados de nuestra vida durante el año que empieza. Sin embargo, según la sabiduría de la Kabbalah, no hay enemigos externos. Nuestro ego —el Deseo de Recibir para Sí Mismo— es nuestro único enemigo verdadero. Los enemigos externos son solamente reflejos de la negatividad que habita dentro de nuestra propia alma. Por lo tanto, esta bendición nos ayuda a erradicar nuestros deseos egoístas de manera que, en su lugar, creemos y atraigamos solo bondad a nuestra vida.
Sélek (silká) – סִלְקָּא - סֶלֶק –
Remolacha (Betabel)
4. En hebreo, la palabra sélek contiene la misma raíz que la palabra hebrea para “eliminar”. A medida que nuestras actitudes negativas son eliminadas gradualmente de nuestro ser, nuestros enemigos externos se van alejando progresivamente de nuestra vida. Con esta bendición, obtenemos el poder para reconocer el verdadero propósito de todos los enemigos externos que percibimos en nuestra vida y, al hacerlo, construir puentes entre nosotros y los demás..
Deláat (Kra) – קְרָא - דְּלָעָת –
Calabaza
5. La palabra en arameo para “calabaza” es kra, que tiene la misma raíz que la palabra hebrea que significa “romper”. Por consiguiente, los sabios de la Kabbalah nos dicen que esta bendición nos ayuda a romper cualquier decreto cósmico inminente que hayamos creado como resultado de nuestros pensamientos, palabras y acciones negativos. Si nuestro corazón está lleno de arrepentimiento, estas palabras sagradas pueden ayudarnos a cambiar los juicios por absoluciones. Esta bendición también nos alienta a reconocer y apreciar la misericordia del Creador. El Creador siempre está dispuesto a perdonarnos y apoyarnos cuando tenemos un deseo sincero de corregir cualesquiera de nuestros errores y cambiar. Cuando reconoces la misericordia del Creador, en realidad activas esa misericordia y permites que los juicios sean anulados.
Guézer (ruviá) – רוּבְיָא – גֶּזֶר – Zanahoria
6. Mediante esta bendición obtenemos el poder de anular cualquier juicio en el universo, como resultado de todo el trabajo espiritual que hemos hecho hasta ahora. Aquí nos conectamos con los méritos que hemos creado a través de nuestros pensamientos, palabras y acciones positivos durante el año que transcurrió.
Tapúaj udevash – תַּפּוּחַ וּדְבַשׁ – Manzana
con miel
7. La bendición más conocida de todas. Que el año que viene sea bueno y dulce de principio a fin. A través de esta bendición, obtenemos la capacidad de ver y sentir la dulzura en todo, incluso en lo amargo. Nos conectamos con las bendiciones detrás de cualquier maldición aparente. También nos conectamos con la energía de renovación y llevamos esta energía a todo lo que hagamos en el año entrante.
Frasá (Cartí) – כַּרְתִי - פְרָסָה – Puerro
(Ajoporro - poro)
8. La palabra aramea para puerro es cartí, que se deriva de la palabra caret (cortar). De nuevo, mediante esta bendición podemos vencer a nuestros enemigos internos y eliminarlos para siempre. Aquí obtenemos la fuerza para eliminar nuestra negatividad desde el nivel de la semilla. Fortaleza para desarraigar y arrancar nuestra negatividad desde su semilla.
¡¡Shaná Tova Comunidad!!
Prana Raquel Pascual - Psicoterapeuta - Coach
Imagen: https://www.recetasjudias.com/guia-para-las-fiestas/rosh-hashana/
