La porción Trumá es muy hermosa. A nivel físico, la historia habla de la recolección de materiales para la construcción del Mishkán, el Tabernáculo.
La porción inicia con el Creador diciéndole a Moshé sobre los israelitas: “Di a los hijos de Israel que Me traigan una ofrenda […] toda persona” mit kol ish asher yidvenu libó, “que la diere de su voluntad, de corazón” kol ish ticjú et terumatí, “de ellos tomarán Mi ofrenda”.
Y hay una hermosa enseñanza del nieto del Baal Shem Tov
sobre esto. Él dice que el uso que el Creador hace de la palabra li aquí es
importante; significa que el Creador está diciendo: “tómenme”, como si la Luz
en realidad estuviese esperando que la tomáramos.
Hay una frase que mencionan los kabbalistas que dice más o menos así: "Más quiere dar de comer la Vaca a su becerro que el becerro comer de la Vaca...
Esta frase de lo que nos habla es que la Luz tiene una naturaleza de dar infinitamente mayor que nosotros deseo de Recibir.
La Luz es un Dar sin fin, los que limitamos el recibir de acuerdo a nuestra capacidad de tomar la luz somos nosotros, por eso en esta porción lo que queremos ser es un tabernáculo más grande, más capaz de recibir lo que hay de la Luz para nosotros.
A veces nos quedamos limitados en nuestras quejas, nuestras creencias, nuestra interpretaciones y preocupaciones pero en vez de sobrepasarlas ampliando nuestra capacidad de recibir más y mejor, de buscar y encontrar soluciones nuevas, nos estrechamos en los problemas del pasado, en la visión de una mente que nos limita ver las opciones.
Para muchos esto lo denominan trauma, algo que nos impactó y nos deja "marcados" y a lo que le damos el poder de dejarnos atrapados en una burbuja del pasado. Nos abrazamos al caos y nos explicamos que "por eso" no podemos ser mejores o más libres o ser felices...pero muchas veces no son las circunstancias la que no nos dejan movernos, sino nuestra manera de interpretar las cosas.
El construir un tabernáculo requiere abrir espacio para tomar la vida nueva de cada día. Se nos pide aportar nuestro deseo tomar nuevas decisiones, nuevos caminos, sembrar distinto para obtener nuevos frutos.
No podemos esperar a que la vida deje de tener obstáculos, sino creer que tenemos lo que necesitamos para sobrepasarlos y HACERLO.
Shabat Trumá es la ayuda que recibimos de la Luz del Creador para abrirnos y sentir el despertar de nuestra alma y corazón.
Prana Raquel Pascual . Psicoterapeuta Gestalt - Coach
Texto en itálicas TRUMÁ Interiorizar la Luz MBerg FEBRERO 2, 2022
https://kabbalah.com/es/articles/taking-in-the-light/
Imagen https://siempremujer.com/salud/cosas-nuevas-lleguen-a-tu-vida/77181/