Al inicio de la porción Vayerá está
la historia de Avraham; en el tercer día de su circuncisión, mientras tenía
mucho dolor, vio lo que sabemos que fueron tres ángeles. Sin embargo, él pensó
que eran tres personas normales, las invitó a comer con él y les preparó toda
una comida.
Hay una sección que habla sobre todas
las acciones físicas que Avraham estaba realizando. Nos dice los detalles de
cómo persiguió los animales y específicamente cómo los cocinó. Incluso en un
nivel muy simple, parece extraño que la Torá dé tantos detalles sobre cómo
Avraham preparó la comida; por eso, debe haber algún entendimiento espiritual
detrás de eso.
Para entender esto, hay una sección
muy importante de un libro llamado Séfer HaJinuj que es una
discusión sobre las 613 Mitsvot, las 613 acciones espirituales, y
algo de reflexión sobre cada una de ellas. En la llamada Mitsvá 16,
la 16º sección, se habla de todas las diferentes acciones que hacemos en Pésaj
y el autor se detiene a preguntar: ¿Por qué tenemos que hacer tantas acciones
para conectarnos con la salida de Egipto? Al igual que encontramos la misma
pregunta sobre la descripción detallada del proceso de preparación de la comida
de Avraham, preguntamos cuál es la necesidad de tantos detalles en las acciones
para conectarse con Pésaj.
¿Por qué el Creador nos pide realizar
tantas acciones detalladas? Muy a menudo, a la gente, incluso las personas
espirituales, le gusta meditar o realizar algún tipo de conexión, pero no creen
que adentrarse en los detalles de las cosas o ser exactos sea “espiritual”. No
obstante, sabemos que, kabbalísticamente, no es suficiente tener una conciencia
o conexión, o meditar; tiene que haber una manifestación de acciones en este
mundo.
El Séfer HaJinuj dice que si queremos obtener sabiduría, debemos escuchar esta enseñanza: Una persona se convierte en lo que hace. Una persona se convierte en lo que son sus acciones. La mayoría de las personas piensa que es al contrario; si soy una buena persona, hago buenas acciones. Si soy una mala persona, hago malas acciones. Mis acciones son una expresión de quien soy. Sin embargo, él dice que en realidad funciona al contrario y que las acciones nos hacen quienes somos.
Me recordó a una película magistral de hace muchos años, El Festín de Babette en el que todo gira respecto a lo esfuerzos de esta mujer, Babette por preparar el más exquisito festín para sus invitados, quizás amerite volver a verla porque es realmente simple pero sorprendente como se refleja esta enseñanza en sus acciones. :-)
Dime qué haces y te diré quien eres...interesante reflexión para aplicar en nosotros mismos ¿No crees?
Feliz día Comunidad
Prana Raquel Pascual - Psicoterapeuta - Coach
Texto itálica Michael Berg https://kabbalah.com/es/articles/person-becomes-his-or-her-actions/ (fragmento)
Imagen https://diccineario.com/2013/08/03/gastronomia-el-festin-de-babette/